PEDRO BONET / Palma

Apenas 15 días después de que el Atlético Baleares diera el primer paso para convertirse en Sociedad Anónima Deportiva (SAD), el club de la Vía de Cintura tiene ya prácticamente apalabradas y atadas 150 acciones para la nueva SAD.

La venta no ha sido efectiva, pero existe el compromiso de que así sea una vez que el Consejo Superior de Deportes (CSD) dé luz verde a desarrollar el proceso que llevará al Baleares a ser una SAD. El visto bueno podría llegar en unos tres meses.

Asimismo, el Banco de Valencia, para facilitar y sobre todo agilizar la compra de títulos, ha llegado a un acuerdo con el club para financiar la adquisición de las acciones, que se puede financiar a cómodos plazos que van desde 12 a 36 meses. Hay que recordar que el capital mínimo fijado era de un millón de euros y que se establecía un precio de 1.000 euros por acción.

A la primera fase, ya en marcha, solamente los socios podrán acceder, suscribiendo una sola acción por cada abonado. El plazo para adquirir este título expira el próximo 30 de junio. A partir de ese momento, se abrirá una segunda etapa en la que sólo tendrán cabida quienes hayan adquirido ya acciones y que se alargará hasta el 30 de julio. Seguidamente, habrá un periodo de dos meses de suscripción popular.

En el aspecto deportivo, la plantilla comenzará las vacaciones el próximo viernes. Esta misma semana se podrían formalizar de manera definitiva las renovaciones tanto del técnico, Gustavo Siviero, como del preparador físico, Juan Manuel Alfano. Precisamente, el técnico blanquiazul, junto al director deportivo, Chichi Soler, han estado viendo partidos de la fase de ascenso tanto a Segunda B como a Segunda A durante el pasado fin de semana. El objetivo es recabar información sobre futbolistas que interesan para la próxima temporada, aunque no se podrá cristalizar nada hasta que no finalicen las diferentes competiciones. La idea del club es que haya entre nueve y diez refuerzos. Esto obligará a la marcha de bastantes futbolistas. No habrá muchas sorpresas, sin embargo, en el capítulo de bajas y la intención, tanto del club como de Inverfútbol, es apostar por futbolistas contrastados.

El guardameta francés Nico Bonis, que fue operado recientemente, en principio interesa al club, aunque todo depende de cómo evolucione de su lesión.. Por otra parte, futbolistas como Laurent o el brasileño Thiago, se han revalorizado tras su buena campaña, lo que ha aumentado las reclamaciones de sus representantes.

El objetivo del club es que el equipo empiece a trabajar el próximo 11 de julio. Por otra parte, el Montuïri, tal y como ya avanzó este periódico, se convertirá en el filial del club de la Vía de Cintura. Las buenas relaciones de la entidad blanquiazul y de Inverfútbol con el ex mallorquinista Tomeu Verger, hombre fuerte en el club de Es Pla, han facilitado el acuerdo. Hay que recordar que Inverfútbol ya cedió a principio de temporada a los brasileños Micha y Williams, que debido a su buen rendimiento volvieron al conjunto palmesano en el mercado de invierno.