Alfredo Santaelena, entrenador del Eivissa, acatará como profesional del fútbol, las decisiones que tome la directiva respecto a su continuidad en el club. Así lo expresó tras el partido en la correspondiente rueda de prensa y a la espera está de que el club le haga saber si sigue siendo el responsable técnico, o no.

Lo que es rigurosamente cierto es que Santaelena abandonó el campo muy tocado en su moral por el varapalo que supone la derrota. No encontró consuelo en un vestuario de futbolistas que dicen estar a muerte con su entrenador (que frase más bien hecha) y que luego no se parten el pecho en el campo el día en que se juegan prácticamente las escasas de por sí opciones que tenían para permanecer en Segunda B.

Al vestuario no acudió tampoco Pedro Ortega, presidente de la entidad, ni para consolar, respaldar o abroncar. El presidente, que ve como se desmorona su castillo de naipes en forma de club, prefirió abandonar el palco presidencial en los primeros minutos de la segunda mitad, con el Osasuna en plena remontada, para bajar a la zona de la cafetería en la que jugó a ser entrenador para, en tono alto, juzgar y opinar acerca de los cambios que hizo Santaelena buscando un revulsivo para el equipo. Revulsivo que no encontró.

El técnico, incrédulo aún de lo sucedido en el terreno de juego y el consecuente desenlace, está acompañado de sus padres, a la espera de la determinación que tome la entidad y con la moral por los suelos. Hundido.

La directiva del Eivissa había cuestionado a Santaelena en los días previos a la visita del Villarreal. El Eivissa dio la cara en el partido, jugó con un hombre menos y el marcador en contra desde el minuto cinco, pero salvó un punto. La misma situación se dio hace una semana en Dénia con idéntico resultado en un claro dejavu.

La derrota ante Osasuna, por el momento y la forma de producirse, le deja al lado del banquillo de Can Misses. Para despedirse de él o para volver a sentarse. El club tiene la palabra y a Tolo Darder como repuesto para cumplir con el trámite de la dirección del equipo en los partidos que faltan.

FUENTE FUTBOL PITIUSO