Tomás Sánchez Venzalá

El San Rafael quiere hacer historia y retornar a una Tercera División que hace años que no pisa. Lo tiene cerca, pero un paso en falso supondría el adiós a un sueño que, poco a poco, empieza a tomar forma. Por eso, Mario Ormaechea, entrenador del equipo, reclama que el Municipal de Sant Antoni registre un lleno absoluto para convertirse en una olla a presión y disminuir las posibilidades del Margaritense, su rival en esta primera eliminatoria.

«Espero un llenazo. Cuanta más gente venga al partido, mejor», dijo el técnico rafeler, quien está seguro de que «habrá una gran entrada» y pretende que se bata «el récord» de asistencia. «Quiero hacer un llamamiento a la afición de Eivissa para que venga a animar a estos jugadores, que se dejan todo en el campo sin cobrar y lo dan todo por el club. Además, ahora mismo somos el único representante de la isla que sigue en juego y necesitamos apoyo», explicó Mario Ormaechea.

Moral a tope

El preparador comentó que la plantilla se encuentra a tope de moral: «El equipo está muy motivado y con ganas de que llegue el sábado para jugar ya». La motivación es mayor si cabe después de haber arrancado un valioso empate sin goles en el partido de ida, lo que permitirá al San Rafael jugarse el pase en casa. Una victoria le sirve y un empate sin goles conllevaría la disputa de una prórroga o incluso de una tanda de penaltis.

Eso sí, un empate a goles, así como una derrota, supondría el adiós a Tercera, de ahí que Ormaechea sea cauto: «Es un partido complicado. Todos sabemos que un gol a domicilio en caso de empate vale doble, así que vamos a tratar de hacer nuestro juego habitual y buscar la portería contraria».

Precisamente cree que ésa será la clave del encuentro. «Estará en marcar más goles que ellos», bromeó inicialmente antes de añadir que «la clave estará en ser fieles a nuestra filosofía y no nos marquen».

El entrenador del San Rafael destacó que «tenemos que andar vivos», pues teme especialmente el poderío físico del Margaritense: «Ellos tienen mucha envergadura. Disponen de cinco jugadores que superan el 1.85, por lo que tendremos que estar muy atentos».

Para el partido de fin de semana, que supone «una oportunidad histórica» según apuntó el técnico rafeler, el equipo no tiene ninguna baja de consideración. «Guillermo tiene un problema en un gemelo y Toño, en el empeine, pero creo que llegarán bien al partido», señaló Ormaechea.

Recepción

Por otro lado, la plantilla disfrutó ayer de una comida en el Ayuntamiento de Sant Antoni, que invitó al San Rafael por la consecución del título de Regional. Hoy reanudará los entrenamientos con una sesión táctica y mañana hará un entreno suave para afrontar con garantías el duelo del sábado.

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