El dueño presenta una demanda por la retirada de «partidas sin justificar» superiores a los 600.000 euros.

M. FERNÁNDEZ / S. A. PALMA. La calma es imposible en el Mallorca. La buena noticia de la clasificación del equipo en la Copa del Rey se vio enturbiada por la denuncia que presentó ayer Mateu Alemany ante un juez contra la familia Martí Mingarro por «presuntas irregularidades» detectadas en las cuentas del club en varias operaciones que superan los 600.000 euros. El andritxol confirmó que tiene el apoyo de los consejeros, de los accionistas y del presidente Tomeu Vidal.

Alemany compareció tras el encuentro para anunciar la demanda. «Antes del partido se ha producido una denuncia en un juzgado por las irregularidades detectadas. He pedido explicaciones –al director financiero Ernesto Chaves–, pero no han sido suficientes», señaló el mandatario, que anunció que hoy iniciará una «auditoría urgente».

«Hay partidas en las que falta el soporte documental y para defender el patrimonio del Mallorca hemos decidido dar este paso», agregó el propietario, quien añadió: «Espero que la anterior propiedad esclarezca estos movimientos o en su caso reintegre estas cantidades que no son imputables al Mallorca». Alemany desveló que mantuvo una conversación por la tarde con Javier Martí Mingarro, que le aseguró que desconocía en profundidad los movimientos económicos que había realizado su hijo Javier Martí Asensio.

El propio abogado indicó que «hay pagos y gastos extraordinarios que aparentemente no tienen relación con el Mallorca y que están relacionadas con sociedades de la anterior propiedad», una acusación que delata la gravedad de la denuncia hecha pública.

«Hay transferencias, talones, pagos directos que no están documentados y queremos saber qué ha pasado», añadió. «Sí, hay viajes, estancias en hoteles… Hay sociedades que han recibido dinero y nos gustaría saber qué han hecho. Nos parece motivo suficiente para ir al juez», concluyó.

Por su parte, el presidente Tomeu Vidal, que seguirá en el cargo, no podía salir de su asombro por el estado de las cuentas del club que había descubierto por la tarde con Alemany. «La palabra decepción es insuficiente para explicarlo», aseguró ante los periodistas. El mandatario recordó que durante su etapa en la poltrona jamás tuvo acceso al estado de las cuentas del Mallorca. «El Consejo de Administración cedió todas las competencias de gestión al consejero delegado Javier Martí Asensio, que es el que lo llevaba todo al cien por cien», afirmó. Vidal dejó claro que sólo piensa en ayudar al actual dueño a pesar de que llegara con el anterior. Una propiedad que mañana viernes celebrará su primer Consejo de Administración.

DIARIO DE MALLORCA