La alarma se ha encendido para algunos equipos de Primera división. El aviso lanzado por Platini semanas atrás respecto a su intención de terminar con las deudas de los clubes de elite va en serio. Y así se reflejó en la reunión de la directiva de la Real Federación Española de Fútbol celebrada el pasado miércoles. Dirigentes de la propia RFEF recordaron que la amenaza de UEFA va en serio, que los equipos que mantengan algún tipo de deuda o que tengan balances con números rojos, quedarán excluidos de la competición continental.

Tanto la Champions como la UEFA Europa League son torneos organizados por el máximo organismo de fútbol continental y además de obtener la clasificación por méritos deportivos a través de las Ligas de cada país, deben recibir la consiguiente invitación de UEFA para participar en cualquiera de las dos competiciones. Las normas y el marco legal del desarrollo de las dos competiciones las marca Michael Platini y en su condición de presidente de UEFA quiere terminar con las deudas en el mundo del fútbol. Esto significa que algunos clubes de la Liga española podrían tener comprometida su presencia en Europa la próxima temporada pese a que consiga clasificarse para ello.

UEFA no contempla dar cobertura a clubes que se hayan acogido a la ley concursal o que mantengan deudas con otros clubes como es el caso del Mallorca, denunciado por el Athletic por el impago del traspaso de Aduriz y cuyo expediente ya está en la comisión jurisdiccional de la RFEF. Deportivo, Atlético de Madrid y Valencia han sido equipos que han tenido problemas económicos más o menos recientes y están en el punto de mira de la UEFA.

El caso más significativo y al que todos apuntan es el Mallorca. El equipo balear no esconde la delicada situación económica que atraviesa y sus dirigentes ven la entrada en la ley concursal como único remedio para poner fin a la crisis. Es más, algunos presidentes de Primera están convencidos de que esta temporada el octavo e incluso el noveno puesto podría dar entrada a Europa, gracias a la decisión de Platini de que el fútbol europeo sea un negocio rentable.

La deuda actual del Mallorca ronda los 40 millones de euros. El club balear ha ido aplazando algunos pagos pendientes, entre ellos el de la Agencia Tributaria de Baleares, con la que llegó a un acuerdo para el aplazamiento por un periodo de cinco años de la deuda. La semana pasada Manuel Rubiales se personó en Palma para interesarse por la situación de los jugadores y para conocer las intenciones del club. De las diferentes reuniones que mantuvo una de ellas fue con Mateo Alemany, presidente del club, que le confirmó que la situación actual de la entidad va encaminada a entrar en el concurso de acreedores.

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