JAUME VALLÉS Un bebé de siete meses resultó herido en Son Malferit tras el derbi palmesano entre el Ferriolense y el Atlético Baleares. El bebé, que estaba anoche en Son Llàtzer recibiendo la asistencia médica, cayó al suelo desde su cochecito al parecer debido a una patada de un aficionado blanquiazul y dentro de los incidentes que protagonizaron las hinchadas de ambos conjuntos al término del partido.

«es muy fuerte»

La madre del niño, vinculada al campo Son Malferit, terreno de juego donde juega el Ferriolense ya que se está acabando el suyo en Son Ferriol, señaló anoche desde Son Llàtzer que «es muy fuerte lo que ha pasado». «Cuando me han dicho que mi hijo estaba lleno de sangre me pensaba que me moría. De aquí pensamos ir a la policía a denunciarlo», añadió.

Lamentable

El coordinador del Ferriolense, Jaume Rosselló, se mostró anoche indignado con lo sucedido. «Es lamentable. Al acabar el partido un grupo de aficionados del Baleares ha lanzado objetos al vestuario del Ferriolense y ha empezado a dar patadas a diestro y siniestro», dijo.

«No sé nada»

El presidente del Baleares, Fernando Crespí, indicó que no sabía nada de que hubiera habido incidentes ni que hubiera un bebé herido. «No he visto nada ni nadie me ha dicho nada. No obstante, si hay un bebé herido es muy fuerte, pero desconozco lo sucedido», opinó.

«No había niños»

El integrante de la peña blanquiazul Revolta, Pau, señaló ayer: «Al finalizar el partido nosotros recogíamos nuestros enseres detrás de la portería y los jugadores del Ferriolense han empezado a cantar y a lanzar consignas contra nosotros. Ha habido algunos incidentes, incluso ha venido la policía, pero la cosa no ha pasado a mayores y tampoco se ha agredido a ningún bebé».

DIARIO DE MALLORCA