Jonathan Ondina no volverá a vestir la elástica de la UD Ibiza a menos que el club le abone las mensualidades que le adeuda. La entidad se ha puesto en contacto con el futbolista asturiano para que regrese con el primer equipo para la fase de Preferente que arranca el próximo fin de semana. Sin embargo, su padre y representante aseguró ayer que Jonathan «no va a volver hasta que no le paguen todo lo que le adeudan». «Ahora mismo no hay nada, él está en Oviedo trabajando y hasta que no hable conmigo quien tenga que hacerlo o de quien sea el club, no irá a ningún sitio», advirtió el padre del jugador.

Después de las falsas promesas que tuvieron que soportar durante meses por parte del italiano Antonio Stina, los Ondina quieren pruebas reales de que los nuevos rectores del club actuarán de manera legal. «Sólo hablaré con quien me acredite ser el responsable legal del Ibiza. Quiero que me manden los poderes notariales y ver que todo está en orden. No voy a negociar con cualquiera. Si tengo que ir a Eivissa voy, pero quiero la garantía de saber con quien negocio. Jonathan no va a ir sin previo pago», subrayó el representante del futbolista.

Maffezzoni abre una cuenta para saldar toda la deuda

Emanuele Maffezzoni, como representante de la empresa Management Lele Corporation, abrió ayer una cuenta a nombre de la UD Ibiza, con poderes de Andoni Valencia, presidente de la Comisión Gestora, en la que pretenden saldar en los próximos días el cien por cien de la deuda que mantiene el club. En cuanto a la deuda con los técnicos, el propio Maffezzoni departió ayer con Tortosa y Ferrer y será hoy, finalmente, cuando les abone el dinero en efectivo.

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