Después de seis años en Tercera, los bermellones regresan a la Regional.

El histórico Atlètic Ciutadella consumó ayer su descenso matemático a Regional Preferente. La situación que se venía anunciando desde principio de temporada se ratificó ayer, a pesar de lograr el empate (1-1) ante el cuarto clasificado, pero que combinado con los resultados de esta jornada, hacen que el equipo de Marc Serrano ya no tenga opción a la salvación a cuatro jornadas para la conclusión de la Liga. Tras seis temporadas, el Atlètic vuelve a Regional, donde permaneció tres temporadas antes de lograr de nuevo el ascenso, algo que, en palabras de su presidente Bep Oleo, «esperamos conseguir lo antes posible, porque es donde creemos que se merece estar este club».

En cuanto al partido, de nuevo el Atlètic se mostró competitivo, mostrando que esto de la clasificación es menos decisivo en cuanto los equipos saltan al campo. Como en muchas ocasiones, el equipo empezó a remolque. Falta que botó Espadas y el balón a la red. La otra única ocasión de la primera parte la tuvo Lucas en un balón que desvió Juanjo tras un saque de banda. En la continuación, a los dos minutos, Juanjo detuvo bajo palos un remate de cabeza de Rafael. Poco después, el mismo jugador mandó un balón desviado. El partido era un continuo rifi-rafe entre jugadores. Tensión que no favoreció a nadie y de la cual se contagió el colegiado para arbitrar sin ton ni son. Llonga, por el Atlètic, y Nando, por el Ferriolense, lo probaron en sendos lanzamientos de falta que desviaron Juanjo y Aram, respectivamente. Pudieron sentenciar los visitantes en los minutos finales, pero ni Vicenç ni Arbos estuvieron acertados ante Aram. Y cuando el partido ya moría, López interceptó con la mano un disparo atlético y el colegiado decretó penalti. Llonga, transformó la pena máxima y estableció el empate definitivo que igualmente condenó al Atlètic Ciutadella. Al final, tristeza por el desenlace del Atlètic en esta Tercera Balear.

«Los jugadores dan la cara»

En la tónica de los últimos partidos, Marc Serrano comentó que «de nuevo hemos complicado la vida a un buen equipo, pero nuestra falta de gol y la actuación arbitral han hecho imposible la victoria. No puedo estar más que orgulloso de estos jugadores, que siempre dan la cara, trabajando al 150% y lo que más me preocupa de los últimos partidos que tenemos es que no haya más lesionados y sancionados y podamos formar once jugadores para los próximos compromisos». Dijo Serrano que «entrenamos con 7 u 8 jugadores, pero el domingo dan el callo», señaló.

Bep Oleo, presidente

Por su parte, el presidente del club comentó que «a partir de ahora tenemos que plantearnos la nueva situación, que no debe desanimarnos. No cabe duda de que queríamos seguir en Tercera, a pesar de la difícil situación económica y me duele especialmente por los jugadores, técnicos y afición». Dijo que «debemos asumir la situación y animarnos para esforzarnos y volver en una o dos temporadas», concluyó.

DIARIO DE MENORCA