El Real Mallorca se ha topado con un obstáculo por ahora insalvable en su intento por embargar los bienes del Deportivo de la Coruña para cubrir la deuda de 1.080.000 euros que los gallegos tienen contraída con los baleares por el impago de Albert Luque: todo el patrimonio de los gallegos investigado hasta la fecha está embargado por otros acreedores. Según fuentes judiciales de La Coruña, el club lleva semanas rastreando en cuentas corrientes, bienes y hasta en los derechos de televisión de la entidad presidida por Augusto César Lendoiro.

El pasado mes de febrero el juzgado de Primera Instancia número 2 de la Coruña acordó el embargo de un listado de bienes que incluía una cuenta bancaria de la entidad coruñesa domiciliada en el Banco Gallego, los derechos de taquilla de los partidos de Liga que se disputen en el estadio de Riazor y el restaurante Playa Club, un local municipal explotado por el Dépor ubicado a cien metros de Riazor y en primera línea de playa.

No obstante, nada se obtuvo a ese requerimiento judicial, toda vez que esa cuenta bancaria contenía un saldo exiguo. Las acciones del Playa Club ya están embargadas y a la hora de intervenir los ingresos en concepto de taquillaje ha aparecido un problema inesperado: ningún administrador judicial quiere hacerse cargo del control de la venta de entradas y recaudación.

Ante la negativa de los responsables del Deportivo a consignar sus ingresos de la taquilla en una cuenta en un Juzgado, el Mallorca pidió en abril la intervención de un administrador judicial que supervisará este capítulo. Pero hasta la fecha ningún funcionario ha querido desempeñar esta labor.

El Mallorca también ha fracasado a la hora de embargar cantidades que, procedentes de otras instituciones, puedan abonarse al Deportivo en concepto de ayudas económicas o subvenciones. El juzgado ha requerido información a la Xunta de Galicia, al Ayuntamiento de La Coruña, a Hacienda y a la Liga de Fútbol Profesional por si el Dépor tuviera derechos de crédito sobre estas entidades, pero no ha obtenido respuesta.

El celo de la institución balear por detectar los bienes de los gallegos les llevó incluso a pedir que el juzgado contactara con la Jefatura Superior de Tráfico de Baleares para que informara de si el Dépor tenía registrado algún vehículo a su nombre, indique el número de la matrícula y la marca del mismo.

La deuda del Deportivo de la Coruña supera los 140 millones de euros, lo que compromete seriamente su viabilidad. El Mallorca traspasó a Luque al club presidido por Lendoiro en 2002 por 15 millones de euros, de los que faltaban por abonar 1.080.000 distribuidos en seis pagarés de 180.000 euros cada uno más los intereses. El pasado 26 de enero un Auto judicial ordenaba el embargo de los bienes de los coruñeses para cubrir ese impago.

diario de mallorca