Francisco Segarra no formará parte del proyecto de Serra Ferrer. El técnico pobler le comunicó ayer al empresario catalán que no acepta sus condiciones para desembarcar en el accionariado del Real Mallorca SAD y, por lo tanto, rechaza la opción. Segarra se mostró «contrariado» por cómo ha sido apartado de un proyecto en el que llevaba varias semanas involucrado. «Por lo visto, se han decidido por otra opción…», apuntó el presidente del Sporting Mahonés.

En el propósito de intenciones de Francisco Segarra, destacaba la idea de adquirir en torno al 40% de los títulos de propiedad del club balear, además de inyectar capital en la tesorería -entre 3 y 4 millones de euros- para poder dar inicio al curso con cierta solvencia económica.

El empresario catalán llegó a la Isla el pasado martes con la intención de concretar su entrada en la entidad de forma inmediata, o por el contrario, en caso de no llegar a ningún acuerdo, dar por concluidas las conversaciones. En la mañana de ayer regresó a su despacho de Barcelona a la espera de recibir una llamada comunicando la decisión adoptada por Llorenç Serra Ferrer. El ‘pobler’ rechazó finalmente la opción de Segarra, por lo que deberá abrir nuevas vías de financiación, preferentemente con empresarios mallorquines.

Sin embargo, quien lidera este proyecto y el que desde el pasado lunes organiza el club a su imagen y semejanza es Llorenç Serra Ferrer, que no ha aceptado las exigencias de Francisco Segarra. De esta forma, la opción del presidente del Sporting Mahonés se desvanece y de momento, el ‘pobler’ cuenta en su grupo con la aportación de Miquel Angel y Rafael Nadal; el diplomático Josep Pons Irazazábal y el ex conseller de Turisme Jaume Cladera, además de Pep Alomar, ayudante de Serra y futuro máximo responsable del fútbol base.

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