11 de los 22 jugadores que configuran la actual plantilla pasarán a ser jugadores de categoría aficionado la temporada próxima.

SEBASTIÁN CANDELA El Sant Jordi que ha jugado esta temporada en la Liga Nacional juvenil –se despide el domingo (12 horas) en su campo ante el Atlético Baleares Atlético– tendrá que hacer un equipo completamente nuevo la Liga próxima, ya que la mitad de su actual plantilla son juveniles de tercer año y la campaña que viene tendrán que jugar en la categoría de aficionados o como profesionales.

Los 11 futbolistas que dejan de ser juveniles han sido, además, piezas básicas en el Sant Jordi este año, por lo que el equipo notará mucho su ausencia la temporada próxima, ya que son chavales que han jugado como titulares la mayoría de los partidos. Los jugadores que acaban son estos: Capilla, Diego, Kevin, José García, Guti, Fran Heredia, Alberto, Pepe, Héctor Barrios, César y Moisés.

Muchos de ellos jugarán en el primer equipo del Sant Jordi de Regional y otros recibirán ofertas para jugar en Tercera División, pero es evidente que reforzarán el futbol pitiuso y aumentarán la competitividad de las Ligas insulares o en Tercera.

El Sant Jordi tiene un problema añadido y es muy preocupante: nueve de los once jugadores que le quedan son de segundo año y el año que viene también abandonarán la categoría, por lo que el club verdinegro se verá obligado a confeccionar otro nuevo y joven conjunto juvenil para que juegue en la Liga insular para que sus futbolistas puedan ir subiendo y reforzando al primer equipo juvenil, si es que sigue en Liga Nacional.

Diario de Ibiza