Segundo entreno para Adrien Goñi, el último en llegar a la plantilla del Sporting. Mañana bochornosa en Bintaufa y tratamiento especial para él y para Sergio Martínez, el lateral. Están desde las once. Dos horas más tarde sus compañeros acaban y ellos siguen un rato más. Cuando Adrien atiende al “Diari”, vestido de calle, sigue sudando como un loco.

¿Primeras sensaciones en Menorca?

Muy buenas. El grupo me ha aceptado bien, y el míster me parece muy cercano. Quiero dar lo máximo

Las referencias sobre sus aptitudes son buenas, pero véndase usted.

Soy un centrocampista creativo y con llegada, pero trabajo para el equipo.

Ha jugado en 1ª División con el Athletic de Bilbao. La afición va a estar más encima suyo.

¿Eso le da más presión?

No. Para nada. Vengo aquí a jugar a fútbol, a divertirme y a demostrar quién soy.

¿Y cómo es jugar en Primera? ¿Fue en San Mamés?

En “El Molinón”, en Gijón. Fue una pasada. Es una experiencia que no olvidaré nunca… En San Mamés llegué a calentar. Y solamente con eso ya aluciné. Es algo increíble.

En el Sporting el objetivo es mantenerse en 2ª B…

No es lo mismo, pero es muy importante. Quiero ayudar a quedar lo más alto posible.

En Girona no le fue muy bien. Llegó en el mercado de invierno y luego se vio en medio de un ERE. ¿Muy duro, no?

Lo del ERE ha sido hace diez días. En principio me tenía que quedar allí, pero llegó este tema y si seguía tenía que ir a tribunales con la AFE. El Girona me ofreció la rescisión del contrato y decidí romper para irme a otro equipo. Para mi fue un mazazo todo. Pero hay que seguir. Con 23 años, soy joven y con toda la vida por delante.

Coincide aquí con un compañero de cantera en Lezama.

Sí, Arkaitz. Lo llamé y me comentó que estaba a gusto. Tenía ganas de conocer la isla, salir de la Península era algo que me seducía. También es cierto que no tenía muchas opciones más, pero estoy satisfecho de estar aquí.

Diario de Menorca