Paco Onrubia ya no es entrenador de la Peña Deportiva. El técnico presentó su dimisión el martes por la noche y la directiva hizo oficial ayer la marcha del técnico albaceteño, que sólo ha durado once jornadas en el banquillo del conjunto de Santa Eulària. Onrubia afirma que abandona el club y la Isla «sin rencor», aunque sus actos lo contradicen. El míster cogió ayer el ferry de las 14,30 horas con destino a Dénia sin despedirse de la plantilla, que ayer por la tarde se entrenó bajo las órdenes de Muriana y Villodre. «No pienso quedarme para hacer el paripé. Lo único que quiero ahora es estar con mi familia», declaró.

«Creo que a la Peña les he salido rentable, tanto económica como deportivamente», valoró ayer el entrenador, que señala que los motivos de su dimisión no se deben «ni a los malos resultados ni a la presión a la que pueda haber estado sometido». «Si empiezan a decir que me voy por esos motivos, es mentira. Llevo muchos años entrenando y hay presión cuando estás en un equipo que está al borde del descenso. Ahí sí que existe presión de verdad, pero aquí, no. Tampoco estoy de acuerdo si dicen que me voy por los resultados, porque de los once partidos que hemos jugados, siete eran ante los primeros clasificados y, aún así, estamos séptimos y a poca diferencia con respecto al play off. Ahora, además, vienen partidos más o menos asequibles y, siendo modestos, creo que podríamos haber acabado la primera vuelta con casi 40 puntos. Lo que pasa es que para estar en un sitio tienes que estar a gusto y yo no lo estaba en la Peña», afirmó.

Onrubia no quiere poner nombres, pero también reconoce que hay «algunas cosas» que no le han gustado nada y que sabe que «habrá jugadores que se alegren de mi marcha». «El año pasado ya hubo problemas con Luis Rueda y, esta temporada, se han repetido. Me han puesto muchas zancadillas, pero el problema no venía de arriba, de la directiva, sino del vestuario. Me he ido dolido con alguien en quien confiaba y que me ha fallado, pero allá cada cual con su conciencia. También hay jugadores que no han estado al cien por cien, o alguno en el vestuario que filtra cosas y que hace que, todos los días, haya un nuevo problema. Si la directiva no toma pronto cartas en el asunto, al próximo técnico que venga le va a pasar lo mismo que a mí», añadió Onrubia.

 

Sorpresa

Tanto la junta directiva de la Peña como los futbolistas han asegurado que la dimisión les ha pillado por sorpresa. «Para la directiva no ha sido tanta sorpresa, porque venimos hablando un par de días de este tema. Cuando no hay plena confianza en el trabajo de uno, lo mejor que puedes hacer es irte. Además, es algo que venía madurando desde hace tiempo. Estaba alejado de la familia y, para estar aquí, debía tener una recompensa emocional fuerte y no la he tenido. Estaba solo en la isla y se me hacía eterno. Tampoco he tenido la sensación de recibir lo mismo que estaba dando al club. De todas formas, ya sólo me queda desear suerte a la Peña. Eso sí, ahora se ganará al Ferreries, que son cuatro chavales, y se dirá que el equipo es muy bueno y que todo va bien sin Onrubia, pero los problemas seguirán ahí», reconoció.

 

El peor balance de las últimas temporadas

La Peña de Onrubia, después de once jornadas disputadas, es séptimo con 18 puntos, lo que supone el peor balance de las últimas campañas. En la 2010/11, con las mismas jornadas, era 5º (19 puntos), en la 09/10 1º (25); en la 07/08 3º (23); en la 06/07 6º (18); en la 05/06 3º (25); en la 04/05 6º (18); en la 03/04 3º (22) y, en la 02/03, 11º (14).

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