Está siendo una dura semana de entrenamientos y de corregir errores. El domingo el Mallorca tiene una cita ineludible ante el Villarreal en la que no está permitido fallar. Con una gran intensidad, los futbolistas y cuerpo técnico preparan todos los detalles para lograr el domingo a las 18h una victoria necesaria para alejar los puestos de descenso y poder disponer de cierta tranquilidad.
Joaquín Caparrós adelantaba media hora el entrenamiento puesto que él y el Presidente Jaume Cladera tenían que desplazarse a mediodía a Madrid para estar presentes en las votaciones para l presidencia de la RFEF. Por ello, el técnico sevillano se retiraba antes de la sesión y dejaba al mando a su segundo, Luci Martín. Éste y el resto de cuerpo técnico proponían un partido para poder continuar con los cambios y pruebas con vistas al duelo ante los amarillos.
Por primera vez durante la semana se contaba con todos los efectivos disponibles. Pina y Tissone ya se reincorporaban de forma íntegra al grupo por lo que el único inquilino en la enfermería bermellona es la de Pau Cendrós, que aun estará entre 3 y 4 semanas a reaparecer. Para el partido, Caparrós recupera a Martí, Víctor y Ramis sancionados ante el Málaga y pierde por el mismo motivo a Chico.
En el entrenamiento de este jueves los futbolistas recibían una visita muy especial; unos sesenta niños y niñas de 1º ESO del colegio Santa Teresa de Palma que han dedicado la mañana a ver a los jugadores en la Ciutat Esportiva Antonio Asensio y más tarde han hecho el tour al Iberostar Estadio.
Próximo entrenamiento: viernes 17 de febrero a las 17:30h en la Ciutat Esportiva
RCDM
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