El torneo internacional de fútbol alevín de Formentera comenzó ayer con gran presencia de público en las gradas del campo municipal, unas 300 personas, que siguieron de cerca el juego de los equipos y animaron con entusiasmo a los jugadores de los ocho equipos en liza.

La competición, que para muchos de los equipos visitantes representa un regalo, comenzó a primera hora de la mañana.

Desde el primer momento se notó la diferencia técnica y física entre los equipos invitados y los de las Pitiüsas, reflejándose en los goles marcados y el juego desarrollado.

El ejemplo más claro fue el abultado resultado obtenido por el Mallorca y el Hércules contra el Insular. Los mallorquines también se impusieron más tarde al Formentera.

En el segundo grupo el Valencia venció al La Salle y el Inter de Milán derrotó al Portmany con ciertos apuros.

Por la tarde la ronda clasificatoria continuó con el mismo ambiente festivo en la grada y similares resultados en el campo, con la clara supremacía del Hércules en el primer grupo y del Inter de Milán en el segundo.

Ambas escuadras estarán en semifinales. Los alicantinos se medirán al Valencia y los italianos al Mallorca en dos partidos que se presentan sumamente interesantes si se tiene en cuenta cómo jugaron ayer en la primera fase.

La jornada de esta mañana comienza precisamente con estos dos partidos, a las 10 y a las 11 horas, y se prolongará durante toda la mañana a razón de un partido cada hora hasta las 13 horas.

Por la tarde, se jugará primero la final de consolación y a continuación la gran final, a la que seguirá la entrega de los trofeos.

El presidente del Formentera, Felip Portas, expresó ayer su satisfacción por el desarrollo de esta cita deportiva, por lo que significa de aliciente para las categoría de fútbol base y al mismo tiempo para la isla teniendo en cuenta que arrastra a unas 300 personas.

Diario de Ibiza