El Mallorca se entrenaba este jueves una hora más tarde de lo habitual, a las 11.00h. El partido ante el Standard de Lieja se disputaba en la ciudad de Wavre a más de dos horas y media de distancia por lo que la llegada al Hotel De Bilderberg se producía a la 1 de la madrugada. Después de cenar, los mallorquinistas se iban a descansar y se consideraba imprescindible retrasar el entrenamiento de la mañana.

Los titulares del primer amistoso de pretemporada -Nsue, Ramis, Nunes, Antonio López, Pereira, Alfaro, Pina, Javi Márquez, Víctor y Arizmendi- trabajaban con Pep Alomar. Este grupo hacía ejercicios de recuperación durante una hora.

El resto de jugadores estaban divididos también en dos grupos; por un lado los porteros y por otro los futbolistas que disputaron menos minutos o no participaron. Éstos trabajaban duro de nuevo junto a Aurelio Ruiz mediante circuitos de fuerza y resistencia con finalización a portería.

La única ausencia era la de Álvaro. El delantero trabajaba con el fisioterapeuta Vicenç Marí dentro del hotel para recuperarse cuanto antes de este golpe que padece en el pie derecho.

Descanso activo

En este día post partido los preparadores físicos diseñaban un entrenamiento de descanso activo. Así, el objetivo era trabajar el tronco superior a través de un circuito de fuerza y dar descanso a las piernas y al corazón después de todos estos días de carga física.

Los porteros se ejercitaban al margen y hoy Luis Llopis les cambiaba de pelota. Hoy la protagonista era la de tenis. El entrenador de porteros les hacía hacer varios ejercicios con estas bolas mucho más pequeños y los lanzamientos eran también con una raqueta.

Al terminar, Caparrós cogía a todos sus futbolistas, repartía los petos como en el primer partido e iba corrigiendo los errores cometidos ayer aunque también alababa algunos aspectos que le gustaron del partido.

Sobre las 19h terminaba el trabajo sobre el césped pero no se acabaría aun el día. A las 20h tocaba sesión de vídeo para ver el partido de anoche.

 RCDM