El partido entre el Formentera y el Campos del domingo se jugará a las cuatro de la tarde, hora en la que ayer se alcanzaron los 39º de temperatura en la pitiusa menor. Se espera un descenso hasta los 26º el día del encuentro, pero con mucha humedad.

El termómetro de la farmacia de Sant Ferran, en Formentera marcaba ayer 39,2º de temperatura pasadas las cuatro de la tarde, expuesto completamente al sol. En ese mismo horario el próximo domingo, el Formentera y el Campos deberán jugar su primer partido de la Liga de fútbol de Tercera División en el estadio de Sant Francesc, que se puede convertir en una auténtica caldera para jugadores y aficionados. El ambiente solo será más soportable si se cumplen las previsiones que apuntan a una bajada importante de las temperaturas este fin de semana.

Miquel Àngel Gili, portavoz de la delegación de Balears de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), afirmó ayer que las previsiones dicen que el encuentro entre pitiusos y mallorquines se disputará con una temperatura ambiente máxima de 26º, pero con un índice de humedad de hasta el 80%, lo que puede ser un factor en contra para los deportistas: «La humedad aumentará muchísimo el domingo. Puede ser que aunque la temperatura sea mucho más baja, los jugadores tengan igual de calor o más porque el sudor no se les evapora», señaló Gili.

Incluso podría haber sido peor si el choque se hubiera disputado a las 12 horas, como inicialmente estaba previsto. Sin embargo, los problemas para cuadrar las combinaciones en el desplazamiento del Campos a Formentera obligaron a fijar un nuevo horario, el de las 16 horas, según manifestó ayer el entrenador del equipo mallorquín. «Jugar a las doce del mediodía era un problema para nosotros y se acordó hacerlo a las cuatro porque nos permite coger mejor todos los enlaces», afirmó Miguel Ángel Tomás.

Para Tomás, el calor y la humedad no son excusas porque están acostumbrados a soportarlos: «Llevamos todo el verano entrenando a las siete de la tarde con altas temperaturas», dijo el preparador de los mallorquines.

Luis Elcacho, técnico del Formentera, manifestó que disputar el partido a las cuatro de la tarde «no es la mejor hora para los jugadores pero sobre todo para la afición», ya que los seguidores pueden pensárselo dos veces a la hora de ir al estadio. Sin embargo, matizó que tuvieron que amoldarse a este horario obligados por el desplazamiento del Campos a la pitiusa menor.

Elcacho apuntó que el calor y la humedad «pueden perjudicar el ritmo del juego» porque los «esfuerzos son más fuertes» y «las recuperaciones más largas», declaró el entrenador catalán. «Creo que será bueno aprovechar cada parada en el partido para que los futbolistas se acerquen al banquillo a beber agua e hidratarse».

Pero si lo que dicen los partes meteorológicos se cumple, el inicio de la Liga de fútbol de Tercera División será menos asfixiante, tanto en Formentera como en los otros campos. Y es que los partidos de la jornada inaugural se jugarán este fin de semana con máximas de entre 25 y 33 grados, lo que significa mucho menos de los registros de los últimos días, según los datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

«En principio, la previsión es que a partir del viernes o del sábado las temperaturas bajen bastante y no se parezcan a lo que tenemos por ejemplo hoy [ayer para el lector]. Para el domingo el descenso general puede ser de entre cuatro y cinco grados con respecto a lo del viernes. Luego veremos lo que sucede», aseguró Gili.

Por tanto, los duelos que a priori se verían afectados por unas temperaturas más altas serían el Manacor-Collerense, el Llosetense-Peña Deportiva y el Ferriolense-Andraitx, en los que los aficionados y jugadores tendrán que soportar una máxima de 33º, según las estimaciones de la Aemet. El resto tendrían registros más suaves, entre los 23 y los 27 grados.

Diario de Ibiza