Indiscutiblemente el mejor entrenador insular, del momento y de los últimos tiempos, Lluís Vidal Pons (Maó, 1962) resulta una figura imburlable al profundizar en la historia más contemporánea del fútbol menorquín. Crucial en el devenir del CD Menorca, con el que en breve inicia el seductor reto de competir en la máxima división juvenil del país, se le distingue también fundamental en varios de los pasajes más brillantes de la existencia del Sporting.

En esta amplia entrevista Vidal evalúa realidad y futuro de ambos clubes en lo que igualmente trasciende a ser un completo tratado sobre su trayecto personal y el del fútbol local.

—Menos de una semana para el ansiado debut. ¿Nervios?

Nervios no. Sensaciones positivas sí. Creo que hemos trabajado duro y bien durante la pretemporada y que estamos preparados para empezar a competir. Lo que nos produce cierta intranquilidad es que no sabemos realmente cual es nuestro nivel respecto a la liga. Eso nos genera algo de incertidumbre y algunas dudas.

—En función de los recursos del club, ¿se ha confeccionado el mejor grupo posible?

Bueno, en principio lo que hicimos fue ir a buscar lo que no teníamos en casa. Yo elaboré una relación de los que creí los mejores jugadores de la Isla y el club, dentro de sus posibilidades, supongo que habrá fichado todos los jugadores posibles.—¿Supone?

Sí, en principio, como te digo, presentamos una lista muy extensa y después la comisión deportiva fichó lo que pudo.

—Es complejo un equipo de División de Honor en la Isla, con apenas recorrido para los jugadores y las migraciones académicas en permanente estado de acción-agresión… ¿este equipo es el futuro del club o es más un lujo puntual a nivel insular?

Esta categoría, sea el club que sea, debe funcionar al margen, de manera independiente. Entiendo que es una categoría en la que no todos pueden jugar y además como tú dices la gran mayoría marcha a estudiar fuera al cumplir los 17. Por ejemplo, nosotros tenemos un bloque de segundo año con el que no sabemos que sucederá la temporada próxima, de cuantos se irán por motivos académicos… Creo que es una categoría que no tiene nada que ver con todo lo demás. Cualquier club que asciende tiene que hacer una selección con los mejores de Menorca, pues es prácticamente imposible subsistir sólo con recursos propios. La División de Honor es algo muy importante para Menorca, para todos los niños, y un escaparate para disfrutar de fútbol de nivel.

—Ningún club local ha prolongado una estancia consecutiva superior a las dos temporadas en esta liga, ¿el Menorca tiene opciones de batir esa marca?

Debe intentarse. Es complicado, pero el primer objetivo es pensar en salvarnos este año. De cara al futuro dependerá mucho del trabajo que se haga, por ejemplo aquí, en el Menorca mismo, de que haya una continuidad con el trabajo realizado en los últimos tres años, en los que ha habido una labor de club con todos los equipos y se ha podido progresar con los chicos y equipos en general. También depende de que la siguiente hornada de jugadores sea la adecuada, pero eso es algo que ya se verá.

—En relación a la experiencia vivida veinte años atrás en esta misma categoría, me comentó; «no vale para nada» ¿ni siquiera a usted personalmente?

Hace veinte años me metí en un pozo sin fondo y me salió rana. Creí cosas y no fue lo que pensamos, y recuerdo que a una semana de empezar aún no habíamos podido fichar ni a Carre ni a Santi Arguimbau, dos piezas clave en aquel equipo. Pero la gran diferencia estriba en que el nivel técnico es más elevado en general; entonces jugábamos en campo de tierra. También después de tantos años la experiencia me dice que lo que debemos es tener los pies en el suelo, trabajar mucho y tener ilusión.

—Dado el desolador escenario del fútbol mahonés, ¿siente el Menorca una responsabilidad mayor o simplemente se centra en lo suyo?

Mayor responsabilidad no sentimos. Lo que sí es triste es como está el fútbol en Maó, y lo ocurrido con el Sporting debería hacer entender a todo el mundo que los mirlos blancos no existen. Lo que debemos hacer es trabajar la base para volver a disponer de buenos jugadores, eso es básico.

—¿Y el club, el Menorca, hacia dónde va?

Hoy por hoy está muy consolidado a nivel social, de niños. Contamos con alrededor de 300 niños y da gusto ver el trabajo que se está haciendo. Creo que la labor realizada durante estos años tendrá continuidad con Marcial Pérez, que lo está haciendo muy bien. El Menorca tiene la base muy bien asentada.

—¿Divisa en Maó algún club capaz de ocupar el hueco dejado por el Sporting?

Si hablamos de meter a un equipo en Segunda B, lo veo muy difícil, económicamente es complicadísimo. Si hablamos de cuidar la base y de poco a poco llegar a un punto en el que gracias a contar con una buena generación de jugadores te puedes meter en Tercera División, el Menorca estará preparado para ello dentro de muy poco tiempo.

—Usted es parte importante de la historia del Sporting, ¿cómo ha vivido su descalabro?, ¿quiénes son los culpables?

Lo he vivido con preocupación desde la distancia, pero también viendo que se han confirmado muchas cosas ocurridas cuando Antoni Gomila deja la presidencia. Gente allegada a Gomila le hizo la ola a Segarra, y después le hicieron la ola al revés, siendo el Sporting el gran perjudicado. Los causantes de todo, entre comillas, fueron la anterior directiva, que defendió a Segarra creyendo que lo hacia bien, pues respecto a los directivos históricos no me cabe duda de que no tienen ninguna responsabilidad. Sé cuanto aman al club, lo he vivido con ellos, cuanto les ha costado… de ningún modo los directivos antiguos tienen culpa. Los culpables son directivos que han entrado en estos últimos años de bonanza, que han ido mostrant es llautó y después, nada.

—¿Qué futuro le prevé al Sporting?

No me cabe duda de que Fernando Osuna es un gran sportinguista, lo ha demostrado siempre. Me merece todo el respeto, al igual que José Bonet, que estando él por medio seguro que vuelven a levantar cabeza. Lo que ya no sé es a que nivel, pero ojalá que el Sporting vuelva a ser un equipo más, el que yo conocí al menos.

—¿Y al fútbol mahonés, qué devenir le aguarda?

Creo que el fútbol mahonés está muy sano. Hay muchos equipos, muchos niños sobretodo. Existe un buen nivel técnico en general. Sant Lluís, Es Castell, Unión, Sporting, nosotros… todos estamos trabajando bien con la base, que funciona muy bien. Otra cosa es si buscamos ilusiones de Segunda B y tal, que eso volverá con el tiempo, si vuelve.

—¿Se arrepiente de no haber salido a entrenar fuera de la Isla?

No, arrepentirme no. Es cierto que en algún momento lamenté no haberlo hecho, pero cuando surgió la oportunidad mis dos hijos acababan de nacer y decidí que tanto para mi familia como para mí lo mejor era quedarme. Para mí ha sido mucho más satisfactorio estar con ellos que no haberme ido fuera. Cuando tuve la opción de irme decidí no hacerlo y no me arrepiento en absoluto, y mientras, me dedico al fútbol, que es lo que me gusta, haciendo las cosas que yo pienso que debo hacer, y el día que no pueda hacerlas, lo dejaré

—¿Está satisfecho de su trayectoria como entrenador?

Sí. Creo que todo lo que he conseguido es mucho para lo que es el nivel de Menorca. Y sobretodo me quedo con la cantidad de jugadores que he tenido y que me han apreciado, no todos obviamente, pero sí, estoy muy satisfecho.

—El que habla bien de usted, habla muy bien, pero el que no…¿Por qué cree que genera tanta controversia entre los futbolistas?

Sí, y encima muchos de los que hablan mal de mí ni siquiera me han tenido como técnico… creo que un porcentaje elevadísimo de los jugadores a los que he entrenado deberían estar contentos de haberme tenido. Todos dirán lo mismo de mí. Que soy muy cabezota, muy duro y exijo el máximo, pero después, cuando han pasado por todo, admiten que conmigo han aprendido. Y para mí eso vale por todo… En cuanto a las etiquetas que puedan ponerme, quizá se deba a la apariencia que doy, de que no soy una persona próxima a la gente, si bien cuando se me conoce saben que eso no es así. Aunque tampoco tengo porque ir dando explicaciones a todo el mundo de como soy.

—¿Qué es el fútbol para Lluís Vidal?

La vida. Para mí el fútbol es todo, una manera de vivir, de entender como vivo y he vivido, y a partir de ahí disfrutas de otras cosas, pero el fútbol es un modo de enseñar a los niños que con trabajo todo puede conseguirse. Sin trabajo no hay nada que hacer.

—Retornando a la actualidad, ¿está el Menorca, a nivel de club, lo suficientemente maduro para asumir esta División de Honor?

Eso está por ver. Creo que a día de hoy todavía no somos conscientes de la categoría en que estamos, la máxima del fútbol español juvenil. Todo el mundo piensa en el Barça, el Espanyol y tal, pero deberíamos pensar en el Sant Andreu, Gavà, Badalona, San Francisco… equipos de nuestro perfil, pero esto es como todo, y cuando llegas a una categoría así, algunos se iluminan y quieren figurar en todos los sitios, cuando quizá debería haber más discreción, pero en definitiva hay mucha ilusión en el club y eso es positivo.

—¿Dónde residirán las claves de una hipotética permanencia?

Sobretodo debemos hacernos fuertes en casa. Contará también la tranquilidad que sea capaz de transmitirnos la directiva y la capacidad que tengamos el cuerpo técnico de armar un grupo de jugadores que crea en lo que hacemos. Si no lo conseguimos sufriremos, pues es fundamental que los jugadores entiendan que esta categoría es para trabajar en equipo y no de modo individual.

—¿Cuál es el mensaje que le traslada la junta directiva?

Bueno, digamos que ellos en teoría están tranquilos, son los que manejan la parcela deportiva y tal. Estamos a una semana de empezar, dan la sensación de tranquilidad, pero ya veremos. Todo se verá con los resultados.

—¿El equipo está cerrado?

No lo sé. En principio están todos bien. Si surge alguna opción supongo que habría posibilidades, no lo sé, pero ese es un tema que a día de hoy ya no me preocupa. En lo que a mi concierne, el pasado viernes cerramos la plantilla cara al partido ante el Sant Andreu y con esos 21 jugadores que tenemos plantearemos el partido para intentar ganar.

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