Es el futbolista de moda en el Club Deportivo Menorca. Hace gala de la mayor eficacia goleadora en el grupo tercero de la División de Honor juvenil. Marc Urbina (Maó, 1995) ha anotado un gol cada veintidós minutos de permanencia sobre el terreno de juego. No es titular, pero nadie le bate en eficacia. Prolongar en el tiempo un registro así sólo está al alcance de los grandes. Lo sabe. Por eso no se obsesiona en seguir aumentando su cuenta goleadora. «Es improbable que siga con esta racha; lo importante es ir sumando», reconoce. Sí espera, no obstante, ganarse la confianza de Lluís Vidal y salir por fin de inicio. Sus números lo piden a gritos. En Girona intentará añadir más lustre a su hoja de servicio.

No es la primera vez que Marc Urbina marca tres goles en un partido. «Aunque ahora hacía ya más de un año que no lo conseguía», recalca. Eso sí todavía anda lejos de repetir aquellas ocho dianas que endosó al Ferreries en su etapa alevín. Enric, actual compañero y cancerbero titular en el equipo de División de Honor, defendió aquel día la portería del conjunto de Sant Bartomeu. «A veces todavía se lo recuerdo y le pico», bromea.

El delantero azulgrana lleva en la entidad del Estadio Mahonés desde que tenía cuatro años. Es por tanto un producto total de la inagotable cantera azulgrana. Ha sido también convocado en varias ocasiones con la selección balear en las diferentes categorías en segundo año.

El olfato goleador que ha demostrado el futbolista en estos dos partidos le mantienen como segundo máximo artillero de la División de Honor. Pero las cifras indican que no hay jugador con más pólvora que él. Salió en la segunda mitad ante el Sant Andreu e hizo lo mismo el domingo frente al Stadium Casablanca. Acumula por lo tanto noventa minutos de juego en dos partidos. Y lleva cuatro tantos. Sólo le supera en la tabla de anotadores el jugador del Zaragoza Diego Suárez con dos encuentros completos en sus botas y cinco tantos de un tirón: esta semana ante el Manlleu. Otro récord en la categoría. «Realmente todo esto es inesperado para mí», subraya denotando una cierta modestia. El delantero que compagina el instituto con los entrenamientos reconoce que verse en el once ideal de la categoría le supone un gran orgullo y un aliciente para seguir trabajando duro en sus ansias de abrirse un hueco en el fútbol. «Se que es difícil llegar lejos, pero para todos nosotros está claro que es un sueño poder a ser grandes futbolistas. Tenemos que aprovechar es este escaparate», explica. Y puestos a imaginar a Urbina le gustaría un día llegar a enfundarse la elástica del Real Madrid. Su equipo entre los grandes. Tanto que le tiene ganas al Barça, líder de la categoría. «A ver que tal se nos da», sonríe. De todas formas la euforia por el excelente comienzo no le supone perder la perspectiva a este jugador hábil en el uno contra uno, al que le gusta dejarse caer por las bandas y que se hace letal en el contraataque. «Nuestro objetivo no es otro que la permanencia, nadie ha perdido la perspectiva por ser en la actualidad segundos en la clasificación», subraya. Por eso el coolíder siguió ayer trabajando con total humildad sobre el césped del Estadio Mahonés. Para Marc Urbina quitarse ahora la etiqueta de revulsivo y demostrar a Lluís Vidal que puede igual de efectivo desde el inicio es su siguiente reto.

Ultima Hora Menorca