Conocemos la versión del Mallorca sobre el despido de los porteros que cubrían los tornos del estadio de Son Moix, a los que acusan de haber montado una trama paralela de venta de entradas. Vamos ahora con el punto de vista de los afectados. En concreto, el del máximo responsable de este organismo, Tomeu Canals, que niega rotundamente la existencia de esa trama.

“Pongo la mano en el fuego por el 99% de los porteros. En cambio, sí que hemos podido comprobar que en el partido ante el Barcelona un miembro de la seguridad dejó entrar a mucha gente gratis utilizando el código maestro de los tornos”, afirma Canals, que tiene 52 años y que lleva en las puertas del Lluís Sitjar y de Son Moix “desde que tenía 16, y mi padre ya era portero del estadio”. “Nos sentimos maltratados porque nos acusan de algo que es falso. Después de jugar ante el Real Madrid nos reunieron a todos y nos dijeron que habían detectado irregularidades a través de las cámaras. Nos obligaron a despedir a cuatro personas, yo creo que de manera aleatoria”.

Los porteros acudirán mañana al estadio “aunque sabemos que no nos dejarán hacer nuestro trabajo”. “Me quedaré en la puerta cero a esperar a Serra Ferrer o a Jaume Cladera. Quiero que me den una explicación, aunque creo que esto ha sido una decisión del director general”. “El domingo ante el Athletic volveremos al campo y pediremos firmas a los socios, porque lo que nos han hecho es una injusticia”, ha añadido Canals, que ha desvelado que los porteros cobraban 23 euros netos por partido “es evidente que no lo hacemos por dinero”, mientras que ahora Trablisa facturará al Mallorca 20 euros por el mismo servicio.

Tomeu Maura