Sentarse a ver un partido juvenil con Tóbal Tudurí es un placer. Comentar la moviola, el jugador que lleva el esférico y sus posibilidades es una gozada porque, como pasa con los enamorados del fútbol, él va muy por delante del que suscribe. En una temporada sin equipo que está disfrutando como un aficionado más, el ex entrenador del Penya Ciutadella se deshace en halagos hacia la División de Honor, se sorprende de que no vaya más público y recuerda que los juveniles de hoy son las estrellas de Primera de mañana. Pluriempleado entre la organización de torneos y la representación de jugadores menorquines, este gourmet del fútbol ve posibilidades a algunos efectivos de la Isla aunque avisa del esfuerzo y el sacrificio que deben asumir si quieren llegar lejos.

¿Cómo se siente en la grada?
Es diferente. Pocos años de mi vida los he pasado fuera de las cuatro rayas del terreno de juego, pero es una experiencia nueva que me gusta, es tranquila y la intento disfrutar.

¿Mejor que en el banquillo?
No se pueden comparar. En la grada estás más tranquilo mientras que en el banquillo es más intenso. Todo tiene su parte buena y su parte mala.

¿Cree, como habitual en las gradas, que el aficionado menorquín disfruta con la actual oferta de fútbol?
La División de Honor juvenil es un gran marco para disfrutar de jugadores muy interesantes y que tienen muchas opciones de llegar a Primera. Me extraña que no vaya más gente al campo del Menorca para disfrutarla. En Tercera solamente hay dos equipos pero hemos visto que son capaces de luchar por estar en lo más alto. El Penya Ciutadella, además, cuenta con mucha gente que acude al campo. Del Mercadal no puedo hablar porque todavía no he podido ir. La Regional se presenta esta temporada como la más igualada de los últimos años. Creo que la oferta es aceptable.

¿Y qué opina de la Liga Nacional juvenil?
La sorpresa agradable la protagoniza el Atlético Villacarlos, que además de jugar bien creo que tiene equipo suficiente para pelear por el ascenso. Dependerá de si tiene suerte con las lesiones y si puede mantener el nivel. En Ciutadella pasan más pena de la prevista. La verdad es que me imaginaba que estarían más arriba y si no mejoran pasarán apuros por mantener la categoría.

¿Que el Menorca juegue en DH ha condicionado las plantillas en Ciutadella?
Puede, pero si fuera la razón exclusiva el Villacarlos tampoco estaría donde está. Es cierto que tener un equipo en categoría superior puede hacer que algunos jugadores se marchen. En el caso del Penya se han ido cuatro efectivos, uno en el caso del Dosa, pero no creo que sea fundamental.

¿Qué estado de salud tiene el fútbol menorquín?
Empezando por Tercera, es el primer año en mucho tiempo en el que solamente hay dos equipos por lo que los mejores jugadores de la Isla se han repartido menos. El Penya Ciutadella quedará entre los cuatro primeros. Tiene plantilla de sobras para lograrlo. El Mercadal también puede hacerlo. Los dos tienen grupos muy equilibrados. En Regional veo a cinco equipos con un potencial similar lo que la hará más atractiva, a diferencia de otros años. En juveniles, tener a un equipo en División de Honor fuera de los puestos de descenso y otros tres en Liga Nacional, permite  alegrarse por la salud del fútbol en la Isla.

¿Qué es lo más atractivo, la categoría del Menorca, el juego del Villacarlos o el del Penya en Tercera?
Sin duda, la División de Honor. Es la máxima competición en España en juvenil y la experiencia que he disfrutado me recuerda que he visto jugar a Montoya, Bartra, Cristian Tello (jugadores del FC Barcelona) o Álvaro (del Getafe) en Ciutadella. Hay jugadores que cuando el Penya estaba en DH eran juveniles y ahora

La experiencia le permite hablar con propiedad. ¿Qué le está pasando al Menorca?
Desde fuera es difícil explicar a qué se debe pero está claro que ganar un partido de los últimos once te condena en esta categoría a no ser que hayas hecho un gran inicio, como así ha sido, y que fue espectacular. Han tenido mucha suerte de que ha sido la primera vez en muchos años que el cuarto por la cola ha hecho tan pocos puntos, lo que les ha permitido estar lejos del descenso a pesar de la mala racha. Cabe recordar que es una competición muy exigente y que es realmente complicado ganar un partido. Ahora hay que ver cómo cuajan las nuevas incorporaciones y ver cómo reaccionan en la segunda vuelta para ganar los cinco partidos que, a priori, le darían la permanencia.

¿Cuál cree que sería la solución? Se habla de fichajes…
Desde la grada se ve que faltan tres o cuatro jugadores. He leído en prensa que incorporarán a tres futbolistas y creo que es bueno porque la Liga es larga y exigente por lo que es mejor tener una plantilla larga, algo que a mi parecer no tenía. No sé cómo fue la planificación pero creo que la plantilla era justa y veo muy acertado incorporar jugadores.

Como gourmet de fútbol, ¿hay algún jugador que le haya impresionado en la Isla?
Me han gustado varios jugadores, entre ellos Marc Urbina y Lluís Camps. Marc, sobre todo, por la facilidad que ha mostrado para marcar goles en una categoría tan complicada. De Lluís me ha gustado la pelea y la entrega constante contra centrales muy buenos. Han sido los dos jugadores que más me han llamado la atención en Menorca. También me ha gustado mucho el bloque que ha logrado el Penya Ciutadella en Tercera porque no tiene fisuras. A excepción de la calidad de sobras que tiene Berto Vaquero para decidir un partido a balón parado, destacaría el conjunto. He tenido la suerte de trabajar con Dani Mori y sé lo mucho que trabaja al equipo a nivel táctico y da gusto verlos porque hacen pocas cosas mal.

¿Cree que tendrían posibilidades de ser profesionales Urbina y Camps?
Si ellos se lo propusieran, estoy seguro. Se lo deben proponer y deben evolucionar. Ellos y otros que también están en el equipo pueden crecer e intentar ser futbolistas.

¿Qué necesita un jugador para llegar a ser profesional?
Lo primero, tener las condiciones necesarias, y luego tener el espíritu y la voluntad de querer serlo con todo lo que implica. Me refiero a sacrificios, mejora, evolución, capacidad de aprendizaje… Hasta que no lo pruebas no sabes si lo tienes o no. Luego ya influye la suerte, que un entrenador crea en ti, que te salgan las cosas… Hoy en día tenemos a varios jugadores de Menorca en equipos importantes. Salir de la Isla siempre es difícil porque solamente por un principio estadístico, hay muchos más jugadores en Madrid o Cataluña. Pero no es imposible. Los que han logrado salir son un espejo para los que tienen la ilusión de marcharse.

¿Qué suele fallar cuando un jugador se marcha fuera?
La falta de calidad, de competitividad y darse cuenta de que en España hay muchos jugadores muy buenos.

Cambiando de tema, ¿echa de menos entrenar?
Hay momentos que sí y otros en que no. Mayoritariamente no, pero estoy convencido de que volveré a entrenar aunque no sé si Regional, juvenil… El fútbol me gusta mucho pero no lo extraño con desesperación.

¿Ha recibido alguna propuesta?
Nada serio.

¿A qué se dedica ahora?
Colaboro con una empresa que se dedica a organizar torneos y estoy muy centrado en ello.

¿Y cómo va lo de representar a jugadores?
Ayudo a un representante y vamos moviendo cosas en beneficio de los jugadores menorquines.

¿Qué ha cambiado de su época de jugador?
Sobre todo los campos de césped artificial. En nuestro tiempo eran de tierra o de césped natural, aunque en casos contados. También la profesionalidad. Antes Tercera era casi profesional y ahora es muy amateur. En División de Honor no noto tanto cambio porque los mejores siguen ahí lo que ahora les empujan más rápido al primer equipo. A nivel de juego siempre ha habido jugadores más físicos y más técnicos.