El Menorca ha mejorado considerablemente en sus prestaciones sobre el campo. El conjunto de Lluís Vidal desprende una imagen y una ambición que en nada se parecen a las exhibían antes del parón navideño. Pero tienen una laguna imperdonable si se quiere seguir en División de Honor.

Los mahoneses han recibido goles en los instantes finales que han condicionado el resultado en cinco de los últimos seis partidos. Una brecha que se ha dado por precipitación y malas decisiones, en algunos casos, o por la calidad del rival, como el domingo ante el Barcelona. El Menorca ha dejado de ganar en este tramo de competición ocho puntos que parecían asegurados de 18 posibles.

En la jornada 15, disputada el jueves 6 de diciembre del año anterior, el Menorca iba ganando 1-0 al Manlleu, rival a priori inferior y asequible. En el minuto 84 llegó el empate visitante que sentó como una losa ya que los azulgrana dispusieron de ocasiones para cerrar el partido pero no las aprovecharon. En el siguiente partido, los mahoneses cayeron sin paliativos ante un Sant Andreu que fue mejor (1-2) en un encuentro cuyos goles llegaron en el primer tiempo.

En la jornada 17, la que despedía el histórico año del regreso a División de Honor, el Menorca visitó al por entonces colista, el Stadium Casablanca. En aquella ocasión, el Menorca parecía haber ligado el empate a 1 tantos cuando en lugar de contentarse con el punto, sus centrales subieron a rematar un córner en el tiempo añadido y en la contra el conjunto zaragozano logró el 2-1. Corría el minuto 93.

El siguiente partido fue el festival de goles sin premio en casa ante el Girona (4-5), cuando el Menorca logró plantarle cara al conjunto catalán, empatando el marcador hasta en tres ocasiones, pero en el 78, un error permitió el último tanto visitante. Otro punto que voló.

La tónica de derroche de puntos se ha mantenido en las últimas dos jornadas. En el campo del Real Mallorca, el equipo de Lluís Vidal iba ganando 1-0 a falta de diez minutos. Varios desbarajustes permitieron el empate local, en el 82, y luego los nervios y las imprecisiones pusieron en bandeja de plata la victoria mallorquina, en el 88.

El partido del domingo fue un caso a parte. El Menorca plantó cara al aspirante a campeón, todo un Barça, al que llegó a tutear, al igualarle el duelo dos veces, pero en el 90, una genial acción de Sandro, hundió las opciones azulgranas.

Mañana, más que tres puntos

El Menorca actualmente ocupa la duodécima posición, un puesto por encima los puestos de descenso. Mañana juega en Mataró contra un rival directo que es el primero que marca la diferencia entre salvarse o descender. En el conjunto catalán son conscientes de la importancia de este duelo y por ello requieren que el equipo cuente con el máximo apoyo y han decidido abrir las puertas al público y la entrada será gratuita.

El Menorca no gana desde el pasado 11 de noviembre, cuando se impuso al San Francisco en un partido extraño, por 4-3 y sus números como visitante solamente arrojan un punto de 27 posibles. El Mataró, por su parte, no gana desde el 6 de diciembre y en la última jornada arañó un punto en su visita al Gimnàstic de Tarragona.

Diario de Menorca