El Atlético Isleño deberá pagar a Antonio Asensio los 8.400 euros que reclama el técnico por haber sido despedido a principios del pasado mes de enero. El Comité de Jurisdicción y Reconciliación, gabinete de abogados externo de la Federación de Fútbol de las Illes Balears (FFIB), resolvió ayer a favor del entrenador, que el pasado 16 de enero había exigido cobrar todo su contrato al considerar que había sido cesado de forma improcedente.

Mientras que el club no liquide el contrato de Asensio o llegue a un acuerdo con él para abonarle lo que se le adeuda, los de Vila no podrán inscribir a ningún técnico ni tampoco tramitar ficha alguna de jugadores, en virtud de lo que establece el artículo 163 del Reglamento General de la Real Federación Española de Fútbol.

El club puede acabar esta temporada sin problemas, pero en la siguiente quedaría completamente inoperativo si no resuelve el contencioso que mantiene con Asensio.

El principal damnificado ahora mismo es David Torres –el elegido para sustituir a Asensio–, que contiunará sin poder sentarse en el banquillo mientras su antecesor no cobre o tenga garantías de hacerlo. Al no presentar entrenador en los partidos, la entidad de Vila deberá seguir abonando una multa semanal, que actualmente es de 20 euros. pero podría pasar a ser de 600 euros si el Juez único de competición estima que el Isleño está saltándose la normativa. Y es que Asensio sigue siendo, a todos los efectos, el preparador oficial del Atlético Isleño.

La resolución ha llegado tras estudiar la demanda del técnico y las alegaciones del club –presentadas el pasado 21 de febrero–, y en las que la entidad ofrecía 1.500 euros al preparador en concepto de finiquito. «Es doctrina reiterada de este Comité que el cese unilateral del entrenador por parte del club implica el abono de todas las cantidades que su hubieran acordado», se explica en el documento federativo, al que ha tenido acceso Diario de Ibiza.

En el fallo también se indica que «no queda acreditado que el entrenador haya percibido la cantidad necesaria para encontrarse saldado, ni tampoco que se haya acordado entre las partes una cuantía diferente a la reflejada en el contrato».

Además, el Comité de Jurisdicción y Reconciliación no ha dado validez a la prueba presentada por el Isleño para despedir a Asensio –varios mensajes de móvil en los que el técnico proponía cobrar cinco meses y dejar su cargo–, ya que «no es posible confrontar su origen ni contenido», y solo se podría considerar como «una oferta conciliadora y no un compromiso de rebaja por los servicios prestados en caso de impago».

Sin recurso por la vía deportiva

Según informaron ayer fuentes de la FFIB, el Isleño ya no puede reclamar esta resolución por la vía deportiva y solo tendría la opción de hacerlo a través de la justicia ordinaria. Sin embargo, el proceso se podría dilatar excesivamente en el tiempo y, mientras tanto, el club no podría tramitar fichas ni de jugadores ni de entrenadores. «Solo les queda pagar», explicó ayer un miembro del ente federativo balear, que ya ha tratado con casos similares a este.

 

 

Diario de Ibiza