Miguel Urbano

El vacío de poder que se presume en el At. Villacarlos una vez anunciada la próxima dimisión de la junta directiva que preside Florencio Conde no ha reactivado, por el momento, a los sectores más vivos del club con vistas al futuro más inmediato.
Los dos expresidentes de la entidad, que ocuparon el cargo antes de la llegada de Florencio Conde, Jaume Ramón y Mario Wolstein, señalaron ayer a este diario su desconocimiento de la situación que ha llevado a la junta a abandonar la dirección de la entidad. “Tendrán sus motivos, pero ha sido una sorpresa, el presidente sabrá por qué ha llegado a esta situación”. Wolstein rechaza, en cualquier caso, volver a ocupar la presidencia del At. Villacarlos, “seguro que no, yo ya estuve cinco años y ahora necesito tiempo para la familia”.

En tono similar se manifiesta Jaume Ramón, que presidió el club antes del Wolstein y contó con Florencio Conde como miembro de su directiva. “No sé lo que ha pasado y tampoco he visto reacción en el pueblo aunque supongo que alguien saldrá del propio club para tomar el relevo. Yo, no, seguro”. Ramón señala que “algo tiene que haber pasado por detrás para que Conde se vaya así”.

El todavía presidente admitía ayer que no tenía conocimiento de ninguna reacción tras haber comunicado la pasada semana, a través de este diario, que había decidido dejar la presidencia por diversas circunstancias. “La verdad es que no he tenido ninguna repercusión después de que apareciera la noticia, ni a favor ni en contra”. Conde sí se reafirma en su decisión irrevocable de dejar el cargo por los motivos que expuso la semana pasada, es decir, haber sido inhabilitado por una presunta mala conducta durante un partido lo que supone un mal ejemplo para todos los integrantes del club, las discrepancias en la junta en torno a la conveniencia de mantener al equipo Regional, el deseo de que no se repita el trance del pasado año con este equipo, y un último motivo que es de índole personal.

Conde, a quien la primera plantilla del club ha criticado con dureza, disconforme con la atención que le ha prestado al equipo y sus críticas al mismo, aseguró ayer que la dimisión se producirá en la próxima asamblea que tendrá lugar la segunda semana de junio, los días 10 o 12. En principio van a dimitir los 11 directivos de la junta aunque alguno de ellos podría estar dispuesto a continuar.

Para entonces la junta ya habrá cuadrado el balance que no arrojará ninguna pérdida. Conde ha señalado que a pesar de las dificultades del curso que finaliza, incluso habrá reducido la deuda en unos 6.000 euros.

Diario Menorca