Hierve la cantera del Sporting de Mahón a raíz de la reciente marcha del que había sido su coordinador, Joan Villalonga, en desacuerdo con la postura de la junta directiva que se niega a abonarle la deuda de 12.500 euros pendiente, contraída durante la época de Paco Segarra.
Varios entrenadores y el gerente del club, Sergi Bagur, amenazaron con abandonar la entidad como muestra de solidaridad hacia el ya excoordinador, después de una tensa reunión a finales de la pasada semana entre los técnicos y la junta que preside Fernando Osuna. El mandatario, que los citó para informarles de la marcha de Villalonga, decidió abandonarla al comprobar como crecía el tono de la discusión entre él y los entrenadores, en especial, Irene Olives, que dirige al benjamín y coordina a los más pequeños.
La también jugadora del equipo femenino considera que Osuna “me echó después de un rifirafe en la discusión, porque se levantó y me dijo que no quería contar conmigo”. Osuna considera que en ningún momento despidió a la entrenadora, “no lo hice y lamento que lo interpretara así, por eso volvimos a hablar y ahora esperamos su respuesta y la de los otros entrenadores, Clara, Zaira y Sente, para que nos digan si continúan o no”. Sí admite Osuna que “me fui de la reunión para evitar que acabáramos faltándonos al respeto”.
El presidente revela que Tolo Bagur será el sustituto de Villalonga desmintiendo así los comentarios emanados del propio club que apuntaban al nombramiento de Elías Noval, entrenador del Regional, como nuevo coordinador.
Irene Olives, que admite tener una propuesta para entrenar en el CD Menorca, considera que “las cosas no se han hecho bien, no puede ser que hasta la semana pasada no supiéramos el presupuesto que iba a tener el club para los entrenadores del fútbol base. Realmente me siento dolida porque no se me ha tratado como creo merecer”, apunta la entrenadora.
La directiva del Sporting comunicó a los entrenadores la necesidad de reducir en un 10 por ciento sus respectivas retribuciones para cuadrar el presupuesto que no ha podido ser incrementado debido a que el número de futbolistas de la cantera se mantiene igual que en la campaña anterior. “Ya se lo comunicamos en mayo o junio, que existía esta opción si no teníamos más niños porque suponía un desfase de 10.000 euros, y así ha sucedido”.
Respecto a la marcha de Joan Villalonga, el presidente reitera que el ya excoodinador se avino a rebajar su nómina en un 20 por ciento, dado que su retribución era mayor, y pasaba de 1.000 a 800 euros más otros 350 por entrenar al juvenil, “aunque el nos exigía que nos hiciésemos cargo de los 12.500 euros pendientes de la época de Segarra, y en eso no nos pusimos de acuerdo porque no podemos afrontarlo, de ahí que decidiera marcharse. Osuna espera que los técnicos reconsideren su postura y sigan al frente de los equipos con Tolo Bagur como coordinador.
Diario Menorca
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