A veces el fútbol es más que fútbol. Y en contadas ocasiones suceden momentos mágicos. Uno de ellos tuvo lugar ayer en el Reino de León. Se jugaban los últimos minutos del partido cuando la afición azul comenzó a entonar, por sorpresa, la canción En el Pozo María LuisaSe hizo el silencio en el estadio. El partido seguía, pero el fútbol ya no importaba. La afición azul recordaba a los seis mineros fallecidos esta semana en La Pola de Gordón, en León, y hacía un homenaje a todos los que han sufrido, y sufren, el dolor de la pérdida de vidas en la mina. Ese cántico, ese homenaje, iba también para todos los asturianos que han perecido en la mina. Asturias es tierra minera y los valores de ese gremio están muy arraigados en nuestra sociedad.

Fue un cántico atronador. Lo entonaban, físicamente, los 1.000 oviedistas que estaban en el estadio, pero con ellos estaban todos los que seguían el partido a través de la radio. Porque los narradores se callaron y dejaron que se escuchara el sonido ambiente. Y entonces, todos los que no estaban en el estadio, se sintieron allí. El cántico era desgarrador. Iba cargado de rabia. Los tres puntos eran ya lo de menos. El partido de León no pasará a la historia del fútbol por el juego y por el resultado: lo hará porque fue el día en que una afición visitante hizo suyo el dolor de la tierra que visitaba. Y lo hizo suyo porque es un dolor que conoce bien. Fue una lección de humanidad.

El Real Oviedo quiere sumarse al dolor de las familias de los mineros fallecidos, y de paso, recordar a todos los asturianos que nos dejaron trabajando en la mina. Nuestra afición, una vez más, ha ido por delante. Como siempre.

Estamos muy orgullosos de nuestra afición, y cosas como la que sucedió ayer nos constatan que tal vez no tengamos la más numerosa del mundo, pero sí que es única y que su forma de ser es irrepetible. Gracias, afición, por brindarnos un momento único. Gracias, afición, por elevar el nombre del Real Oviedo con cada cosa que hacéis. Este club es grande gracias a vosotros. El Real Oviedo es grande por vuestra grandeza.

Real Oviedo