Miquel Bestard, presidente de la delegación balear de la Mutualidad de Futbolistas Españoles, además de máximo mandatario de la Federació Balear, recogió anoche el rechazo unánime de los clubes menorquines a Onofre Alba, el médico que regenta la empresa Gemedeba que es la que tiene contratados los servicios de la Mutua en el archipiélago. «Tengo clara vuestra postura, ahora acabala temporada y os prometo que haré lo que pueda», concluyó el primer dirigente del fútbol balear.

Retraso en el diagnóstico, ya que el doctor Alba solo se desplaza a Menorca los viernes para pasar consulta y él es el único que decide sobre las pruebas médicas a realizar, tardanza en el el tratamiento, además de falta de información, y, en algunos casos, posibles errores en su criterio médico, fueron las quejas que repitieron los presidentes y representantes de CE Alaior, UD Mahón, At. Ciutadella, Sporting de Mahón, Menorca, Mercadal, Penya Ciutadella y At. Villacarlos, presentes en la sede de la JIM. Josep Oleo, del Atlètic, subrayó que no tiene sentido tener que esperar una semana a que visite Alba en Menorca «habiendo buenos centros médicos y excelentes profesionales en la Isla».

Con el tono conciliador y positivista que le caracteriza, el dirigente mallorquín reiteró su intención de contentar a los clubes a partir de las quejas que éstos expusieron hace dos semanas en la encuesta publicada por este diario, que fue desgranando el propio presidente para darles respuesta. Bestard recordó que fue él quien consiguió que las revisiones a los jugadores sean gratuitas, a diferencia de lo que sucede en otras territoriales, al tiempo. Fernando Osuna, del Sporting de Mahón, sin embargo, precisó que en la zona de levante los jugadores pagan 6 euros por revisión en función de un acuerdo particular entre clubes y médico de hace más de 20 años, indicó el presidente de la JIM, Virgilio Juaneda.

Bestard también recordó que la cobertura de la Mutua a los futbolistas es de todo el año y admitió que quizás sí debería existir mejor coordinación en el servicio.

Respecto a las cuotas, puso como ejemplo lo que cuesta una mutua privada, «yo y mi mujer pagamos casi 300 euros», dijo.

El trabajo de Juan Millán, delegado en Menorca de la Mutualidad, fue reconocido y elogiado por la mayoría de los presentes por la dedicación que presta en cada caso que se le plantea.

Diari Menorca