Con la ilusión y la ambición por bandera. De esta manera levantó el telón de la nueva temporada un Formentera con más bajas de las deseadas respecto al anterior curso, cinco, pero, al mismo tiempo, con ocho caras nuevas que dan un restyling importante a un plantel que tratará de conseguir, por tercera campaña consecutiva, el ansiado ascenso a Segunda División B. Éste, y no otro, es el objetivo de los hombres del entrenador Elcacho, que afronta, junto a Gerard Garcés, su tercer proyecto deportivo al frente del grupo rojinegro.

Ayer lunes, el equipo se puso el mono de trabajo y, después de un merecido mes de vacaciones, empezó a sudar las primeras gotas de sudor de una campaña que vuelve a ser igual de esperanzadora para la familia de un Formentera que no contará con Piquero, Moreno, Diego Romero, Ángel Ramírez, Damián Coronel, Néstor Trujillo, Jesús Cruz y Dani Argilaga. No en vano, se han subido al barco José Ayala, Chendo Alarcón, Óscar Tena, Alberto Górriz, Lluís Micaló, Jaime Noguerol, Carlos Pérez y Manzi. El joven mallorquín Miguel Ángel Cruz estará a prueba.

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