“Hay mucha competencia en el puesto con Cabrero y Rubén Miño pero yo sigo trabajando cada día para conseguir un puesto en el equipo. El hecho de no debutar el domingo no significa nada. Iba a salir en el minuto 80 pero el míster consideró que no era el momento porque estaba frio y ellos presionaban mucho. No hay ningún motivo para estar descontento, solo tengo que seguir trabajando duro para jugar cuando lo necesite el equipo”.

“Jugar en el Mallorca B nunca es un paso atrás, jugar siempre es positivo y ya digo, estoy a disposición del grupo y del entrenador para lo que se necesite. El entrenador ha llegado con mucha ilusión, nos ha dado fuerzas para que no se repita lo del año pasado. Nos pide que seamos un grupo de compañeros, nos ha dado tranquilidad y eso en el vestuario se nota. Ya se vio en el partido de Nuremberg que la cosa va bien porque luchamos hasta el final”.

“Nosotros no nos fijamos en lo institucional, nos centramos en lo deportivo que es nuestro trabajo. Los fichajes nuevos han llegado muy bien, los que jugaron estuvieron finos”.