Alineaciones:

At. Baleares: Víctor Pérez, Jairo, Bernat Alomar, Damià, Biel, Esteban, Dalmedo, Cristian(Cifu min. 77), Oller(Miguel min. 57), Fernando, Carlos(Ignacio min. 71).

Nastic: Reins, Gerad, Angresola, Campos, Pablo Marí, Xavier, Luismi(Marc min. 71)i, Rocha, Azcorra(Lago Júnior min. 67Ç), Marcos, Ferrán.

Gol: 0-1 Rocha min. 57

Árbitro: Raúl Martín González Francés, asistido en bandas por Tanausu Rayco De las Nieves Martín y Raúl Suárez Ramos del comité de Las Palmas.

Tarjetas: amarillas para los locales Dalmedo min. 20, Jairo min., 50, Bernat Alomar min. 78 y Damià min. 81 y para los visitantes Gerad min. 52 y Campos min. 59.

Comentario:

Instalarle cañones a un velomar no resulta sencillo, pero la ausencia de pólvora en el conjunto blanquiazul resulta evidente. Tras cuatro jornadas de liga la sensación de armonía y frescura brilla por su ausencia y, aunque se sobran en compromiso y actitud, está claro que a este conjunto le falta algo.

Aunque estamos en la fase inicial del campeonato, la falta de discurso con el cuero está sacando a pasear las primeras explicaciones –legítimas, por supuesto- con que justificar la ausencia de resultados: un calendario inicial muy complicado, lesiones, arbitrajes poco acertados… Aunque todo ello fuera cierto –que lo es-, el juego del Atlético Baleares denota carencias. Sólo Nando Ramón parece a la altura de lo mínimamente exigible en lo artístico. El derroche físico, por el contrario, es generalizado.

Se guardó un minuto de silencio en memoria de David Grimaldos, trágicamente desaparecido hace escasas fechas.

El aparente morbo del encuentro dejó paso a otra mañana de escasez. Imprecisiones y tiros a palos sustituyeron anheladas triangulaciones, toques y tiros con criterio. ¿No hay más? Creemos que sí, pero de momento no asoma por el federativo de Son Malferit.

Otra vez un millar de personas animaron para intentar retener los tres puntos, ante un equipo muy sólido, que se plantó sobre el rectángulo arropando a guardameta y zagueros y poco a poco se fue estirando hasta llegar a dominar la zona ancha, y a partir de ahí aprovechar los laterales para crear peligro. Los locales, como siempre, con muy buena predisposición inicial, sin renunciar al cuerpo a cuerpo y luchándolo todo, pero ineficaces a partir de los tres cuartos de campo, sobre todo en la segunda parte.

El primer disparo serio fue local. En el minuto 7 Oller lanzó sobre la portería de Reina.

En el 25 fue Carlos Rodríguez quien remata fuera tras pase de Nando. Un minuto después contabilizamos la primera incorporación de un lateral del ATB (Jaime) que finalizó con centro peligroso que despejó la zaga del Nàstic. Y en el 41 una pérdida de balón del cuadro visitante acabó con lanzamiento cruzado de Carlos Rodríguez, muy activo en la primera mitad, a la derecha de Reina. Los de Nico López mantenían el tipo: 0-0 al descanso.

El segundo tiempo comenzó con cambio posicional de Carlos Rodríguez, que pasó a banda derecha. Oller seguía siendo la referencia en ataque y Nando Ramón el faro de todo el equipo. Guasp corría bien la banda y Esteban salía ocasionalmente de la línea de cuatro para pelear unos metros más arriba. En el ‘3 de la reanudación un claro empujón sobre Oller dentro del área comenzó a escorar la labor arbitral. Señaló córner. Un minuto después Jaime acompañó en amarilla a Ignasi, quien la había visto en la primera mitad, por una entrada por detrás en medio campo. Dos minutos después la recibió el visitante Gerard, que pudo ver la segunda más adelante en una contra blanquiazul por tocar el cuero con la mano. El colegiado tampoco la vio.

Un remate de cabeza de Nando fuera del marco visitante fue la única ocasión local en los primeros instantes de la reanudación. Acto seguido Ignasi lanzó fuera.

En el ’12 llegó el único gol del encuentro. Tras larga jugada del Nàstic el esférico llegó a línea de fondo desde donde Luismi colgó al segundo palo para que David Rocha empalmase de volea cruzando el cuero ante Víctor, que no pudo detener. Fue una ejecución perfecta,en el más amplio sentido de la palabra.

Movieron ficha ambos técnicos: a la ducha los nueves. Ripoll entró en los locales y Lago Junior en los visitantes. Le aplicó más intensidad el Atlético al juego, pero a partir del ’23 hicieron acto de aparición las primeras contras peligrosas del Nàstic, bien asentado atrás. Mossa puso cuero largo a Ferran Giner quien centró sobre el área pequeña sin encontrar rematador. Achicaron los locales con apuros.

Reaccionó el equipo de Nico con doble lanzamiento de Carlos Rodríguez que atajó Reina. Un minuto después el delantero dejó su lugar a Nacho, mientras Luismi daba paso a Marc Martínez en los visitantes.

A la media hora del segundo tiempo las faltas sobre Nando Ramón eran constantes. El público la emprendió con el juez de línea más cercano a tribuna. Éste se vengó levantando bandera continuamente por posición de fuera de juego de algún jugador local. No siempre acertó.

Tras un lanzamiento de Ignasi a las manos del guardameta Reina, movió banquillo Nico López: Cristian dejó su lugar a Cifu. Poco cambió el encuentro. Una falta de Bernat Alomar en el ’33 le costó amonestación. Lanzó el goleador de la mañana y detuvo Víctor. Dos minutos después una contra del Nàstic finalizó con falta y la misma sanción para Damià Ramos.

Un córner a favor de los grana en el 37 acabó con disparo de Xisco Campos y paradón de Víctor. A medida que la solana iba madurando jugadores las contras del Nàstic se tornaban más peligrosas.

Un cuero alto de Nacho a Ripoll en el 40 superó la zaga visitante pero Reina leyó bien la jugada y detuvo el balón.

Las protestas por el arbitraje en los minutos finales quedaban solapadas por la evidente falta de mordiente local. El resultado, aunque pudo ser otro, se aceptó como justo.

En sala de prensa el entrenador visitante expresó su alegría por haber conseguido adaptar el juego de su equipo a un terreno de juego nada favorable a su perfil, mientras Nico López consideró que la entrega de sus hombres fue total; apuntó que el dominio había correspondido a los suyos y la victoria hubiera podido llegar, aunque argumentó falta de ocasiones en los metros finales. No le gustó al míster local el arbitraje, y destacó el comportamiento civilizado y señorial de los aficionados.

 

 

 

Daniel Riera para Fútbol Balear.
Fotos de María Pons, Lluc Martorell, Guillermo Sánchez y Toni Moya para Fútbol Balear.