El Mallorca B esta perdiendo fuelle en este campeonato de liga de Segunda B, ha ganado dos partidos en casa y ha perdido uno y fuera a empatado uno y perdido dos de los seis partidos disputados, el equipo de Olaizola de los últimos nueve puntos disputados solo ha sumado uno.

Ahora el equipo se enfrenta en los próximos tres partidos a tres filiales, Espanyol B, Real Zaragoza B y Villarreal B, lo que es un arma de doble filo, se puede poner arriba si saca buenos resultados y puede quedar abajo si pierde, los filiales siempre son complicados, jugadores muy jóvenes pero con mucho talento y son toda una incógnita, el primero el Espanyol B es líder ahora mismo del campeonato con un muy buen inicio de temporada, sin embargo los otros dos tienen un punto menos que los rojillos y no han terminado de arrancar, por ello esperamos que Javier Olaizola sepa aprovechar el talento de sus jugadores jóvenes, labor siempre extremadamente complicada y consiga escalar posiciones, ello da la tranquilidad necesaria para forjar elementos validos para el primer equipo.

Redacción