Francisco Natera

José Alberto Marí es uno de los mejores fisioterapias de Ibiza y su clínica, CIRF, una de las más afamadas y prestigiosoas. Este profesional es un verdadero astro con las manos y todo el mundo habla maravillas de sus logros. Por su consulta pasan a diario decenas de pacientes de toda índole y todos coinciden a la hora de afirmar que José Alberto es un santo. No en vano, le apodan el hombre milagro.

No hay lesión que se le resista y muchos son los jugadores de equipos pitiusos que no dudan en confiarle su salud. Acorta los plazos de recuperación como nadie y en el San Rafael, club donde presta sus servicios, saben muy bien cómo se las gasta el Messi de la fisioterapia. Fútbol Pitiuso ha hablado con José Alberto y esto es lo que nos ha contado.

¿Cómo llegaste al mundo de la rehabilitación deportiva?

Hace algunos años empecé a especializarme en lesiones difíciles y la verdad es que se me daba muy bien la fisioterapia y osteopatia, así que tras una propuesta de un paciente que estaba muy introducido en el mundo del fútbol, me planteé que podría ofrecer un gran beneficio en este campo con técnicas innovadoras. Los entrenadores siempre han sido muy meticulosos a la hora de recuperar a sus jugadores con la mayor brevedad, por lo que tratar de colaborar en dichas exigencias me pareció una aventura muy interesante, un reto personal que hoy en día considero que está más que cubierto.

¿Cuál es tu trayectoria en este mundillo?

Comencé en la seguridad social, pero mis inquietudes profesionales iban mas allá, por lo que decidí completar más mi formación y dedicarme a mis pacientes al cien por cien. Lo que obtengo son resultados y cuanto más difícil es la patología diagnosticada mayor es el beneficio. La gente necesita que les traten como personas y les curen y yo disfruto mucho dando salud a mis pacientes.

¿En qué consiste la fisioterapia deportiva y hasta qué punto es importante?

La fisioterapia deportiva no es muy distinta de la fisioterapia traumatológica. La diferencia reside en que en la deportiva se requiere de técnicas algo más precisas que ofrecen mayores resultados, pero ambas disciplinas deben ir de la mano.

¿Cuál es tu punto fuerte?

Diría que mi implicación con el paciente, la habilidad para absorber nuevas formaciones y la capacidad para ofrecer resultados, aunque esto es algo que deben valorar las personas que he tratado y no yo.

 

¿Qué papel desempeñas en el San Rafael?

Ofrecer al entrenador la mejor recuperación y más corta posible tras la lesión de sus jugadores. Las estadísticas marcan que somos el club con menos bajas por lesión hemos tenido desde hace tres temporadas. La prevención y el estudio biomecánico del futbolista es muy importante.

Los jugadores de Vicente Román están en óptimas condiciones físicas, sin lesiones de importancia. ¿Cómo gestionas la enfermería del equipo? ¿Es difícil?

No es tarea fácil; tengo a mi cargo muchos jugadores y poco tiempo, pero lo llevo bien. He de decir que uno mentalmente no se encuentra siempre fuerte, bien por agotamiento u otras cosas y en ocasiones me resulta más dificultoso. De todos modos, me encantan los retos y a día de hoy todo va subre ruedas.

¿Cuáles son las lesiones que tratáis los fisioterapeutas a los futbolistas con más frecuencia?

Esguinces, contracturas, contusiones, distensiones fibrilares…. me he encontrado ya de todo y, en ocasiones, dolencias de enorme dificultad.

¿Cuáles crees que son las medidas preventivas más eficaces para evitar las lesiones?

Analizar la biomecánica de cada futbolista, su forma de correr, de pisar, sus apoyos… y calcular cuál va a ser su lesión a medio plazo para atajarla en fase inicial.

¿Cuál es tu mayor logro profesional?

Sin duda, tener el honor de dar salud a las personas y si tuviera que elegir un logro diría la vez que traté una lesión importante de hombro predispuesta para cirugía en dos sesiones.

¿Cómo es tu relación con los jugadores?

Por mi manera de ser es cercana y de amistad con gran parte de ellos.

¿Ha habido alguien que haya marcado tu carrera?

Lo cierto es que han sido varios profesionales, con los que he tenido el gusto de estudiar. Francesc Rubí, Jaume Ferrer y Alfonso del Corral, entre otros grandes cracks.

¿Qué sensaciones tienes después de tantos años ejerciendo la profesión?

Muy positivas. Estoy muy satisfecho del trabajo bien hecho y me enorgullece el reconocimiento de mis pacientes, de los que estoy muy agradecido.

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