Ernesto García consiguió el pasado domingo ante el Écija Balompié su primer gol con el Ceuta desde que llegó al equipo el pasado mes de enero como uno de los refuerzos de invierno del conjunto blanco. Fue un gol que, además, les dio a los ceutíes tres puntos imprescindibles para seguir soñando con recortar su desventaja de 7 puntos -8 con el ‘gol average’- con el Atlético Sanluqueño Sanluqueño y disputar el ‘play off’ de ascenso. El centrocampista balear está convencido de que hay tiempo para reengancharse a los puestos de privilegio.

Ernesto se muestra “contento por el gol y por el trabajo del equipo ante el Écija. Era un partido difícl, el Écija venía fuerte después de siete partidos sin perder y demostramos nuestra fuerza en casa”, comenta.

El gol del Ernesto, que llegó en el minuto 54 a la salida de un córner botado por Pucho, sirvió para que el conjnunto ceutí venciera al astigitano y mantenga viva la esperanza de acabar entre los cuatro primeros. “Quedan 27 puntos y no nos vale fallar. Nuestro problema es que vamos fuera de casa y nos cuestan bastante, pero nos quedan nueve finales si queremos meternos en liguilla”.

Sin margen de error

Aunque el margen de error del Ceuta se ha reducido al máximo, el mediocentro balear está convencido de que el Sanluqueño puede fallar en las nueve jornadas que quedan para que acabe la Liga regular. “En este grupo te puede ganar cualquiera, quedan muchos puntos por delante y creo que tienen que fallar, y nosotros no fallar. Nuestro punto débil está fuera de casa, tenemos que intentar enderezarlo e ir a final por partido si queremos estar ahí”.

Ernesto lamenta que el Ceuta se haya salido de los puestos de ‘play off’ en los que estuvo durante muchas jornadas consecutivas. “El equipo empezó la primera vuelta muy bien, no quiero pensar que los refuerzos hemos echado al equipo para abajo”, bromea. “El fútbol es fútbol, a veces hay rachas malas y yo confío en el equipo”, añade.

Dos temporadas más

A título individual, Ernesto, que se comprometió con el Ceuta por lo que resta de temporada y dos más, se siente muy a gusto en en el equipo blanco, que tuvo que abandonar antes del final de la pasada campaña por un motivo personal ajenos al fútbol. “Personalmente, me encuentro muy bien aquí, esto es como una casa, tanto con los compañeros como con la gente de fuera. Esta ciudad me ha tratado bien y me encuentro bastante bien. He hecho una mini pretemporada por mi cuenta y sigo entrenando mañana y tarde. El míster confía en mí y yo a correr y a robar balones para dárselos al que sabe”, termina.

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