Por primera vez en la historia de la Federación Gallega de Fútbol, unas palabras escritas por jugadores en una red social serán estudiadas por una jueza instructora por si fueran constitutivas de sanción. Se trata de los futbolistas del Laracha Dani Bea, Iago Iglesias, Antonio, Beto, Óscar la Magia Martínez, Brais, Rebolo, Miguel Taibo, Róber, Denis y Alexandre; el del Silva Michi Leal; y el del Unión Grove Giao. Todos ellos se quejaron, presuntamente, de la labor arbitral del colegiado Extremadura Hernández en el duelo del pasado 1 de marzo (Laracha-As Pontes) y se enfrentan a unaposibilidad de castigo de 2 o 3 partidos, en caso de que sean calificadas sus palabras como menosprecio; o de 4 a 12, si la jueza interpreta insulto.

En aquel duelo celebrado en el campo Municipal de A Laracha, los locales acabaron muy enfadados al entender que habían salido muy perjudicados. Nada más acabar el encuentro, gran parte de la plantilla del Laracha se lanzó a las redes sociales para constatar su indignación por la labor del colegiado vigués, con tuits como el de Óscar Martínez en el que apuntaba: «señoras y señores, un día más y ya van 500 (por lo menos), volvió el circo de los muñecos de Extremadura Hernández». «Vergonzoso», calificaba Antonio. «Malo, penoso, lamentable, pero sobre todo mala persona», añadía Taibo. «Podría hacer un libro hablando de este h, de p.!! Hay que unirse y acabar con esto», exclamaba Dani Bea. «Chulo, prepotente, flipao, mala persoa… Súa nai non ten culpa, pero que se ría do traballo da xente, é pa darlle unhas boas hostias!», replicaba Denis. Otros, como Iago Iglesias, fueron más cautos: «Llevo no sé cuántos años jugando al fútbol y jamás reparo en errores arbitrales, pero lo de hoy no lo había vivido en mi vida». En el caso de Michi Leal, el tuit por el que ha sido expedientado es del año 2012, tras un Betanzos-As Pontes, refiriéndose al mismo colegiado.Las palabras de los citados trece jugadores llegaron hasta el Comité Técnico de Árbitros, que las denunció ante Competición. Este, comunicó ayer a los clubes implicados la incoación de una providencia de expediente extraordinario.

Para ello, nombró a Carmen Carrillo como instructora y la letrada ya inició el procedimiento solicitando alegaciones a todos los implicados. El proceso puede ser largo, porque una vez terminado el plazo de tres días, puede volver a pedir más información, si lo estima pertinente. Hay que tener en cuenta que es la primera vez que se aborda el tema de las redes sociales y la jueza tendrá que comprobar si las cuentas pertenecen a los sujetes a quienes se les han atribuido esas declaraciones. Cuando tenga toda la documentación, propondrá una sanción al Juez Único de Competición, que será quien tenga la última palabra.Cada jugador se enfrenta ahora a tres vías. Que los jueces estimen que no se ha menoscabado el honor del árbitro y por tanto se cierre el expediente; que entienda que haya menosprecio; o que haya insulto. En el segundo caso, la Federación Española de Fútbol (a la que pertenece la Tercera División) estima una sanción de 2 a 3 partidos; pero si es insulto, la suspensión podría ir de 4 a 12 encuentros.Dos integrantes del Laracha ya habían sido sancionados por la vía ordinaria tras aquel encuentro. El técnico Ambrosio Oróns recibió un castigo de 7 encuentros por «insultar, ofender o dirigirse en términos o actitudes injuriosas» a los árbitros y el jugador Rebolo con 2 por «menosprecio».

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