La Unión despidió ayer la temporada, en el restaurante del Hipodromo Son Pardo a la que asistieron directivos, jugadores, entrenadores padres y familiares y la directiva de la Federación Balear de Fútbol Chus Tamurejo.

La noche se presentó muy animada y con la mayor alegría posible que pudieron celebrar todos los asistentes y no es otra que la permanencia en la Primera Regional Preferente de la primera plantilla del club por el ascenso a Segunda División B del CD Llosetense, partido que pudieron ver todos los asistentes que estaban pegados a la televisión y que tras el pitido final estallaron de jubilo.

Antes del comienzo de la exquisita cena se repartieron los trofeos a todos los equipos y jugadores del club, que fueron pasando uno a uno para que los papas en esta ocasión les hicieran la entrega algo inusual y muy emotivo.

Redacción