Aprobada en el IV Congreso de Fútbol Aficionado, será trasladada a la Asamblea de la RFEF, donde se tiene que aprobar.
El IV Congreso de Fútbol Aficionado, organizado en el Kursaal de San Sebastián por la Federación Española de Fútbol, ha aprobado este viernes trasladar a la Asamblea de la RFEF una propuesta para reestructurar la actual configuración de los grupos de Segunda B y Tercera división. La propuesta, liderada por Marcelino Maté, presidente de la Comisión Gestora de la Federación, ha salido adelante con un voto en contra y dos abstenciones.
Según esta revolucionaria propuesta, que tendría que recibir el visto bueno de la Asamblea de la RFEF para poder llevarse a cabo, la actual Segunda división B se dividiría en dos a partir de la temporada 2019-20:
Serie 1: compuesta por 20 equipos, que serían los cinco primeros clasificados de cada uno de los cuatro grupos de la actual Segunda B al término de la temporada anterior a la del comienzo de la reestructuración.
Es decir, la Segunda división B estaría formada por 80 equipos, igual que en el actual formato, pero habría una especie de «dos subdivisiones».
En principio, los equipos filiales podrán seguir participando en la competición en Segunda B y Tercera, aunque no se ha explicado el sistema de ascensos y descensos en ambas categorías que se recoge en la propuesta de reestructuración.
En este Congreso del Fútbol Aficionado también se ha aprobado una propuesta para reformar la Tercera división, compuesta actualmente por 18 Grupos. Como en el caso de la nueva Segunda B, habría dos «escalones» en esta nueva categoría:
Serie 1: formada por 6 grupos:
Grupo I: Galicia, Asturias, Cantabria.
Grupo II: Pais Vasco, La Rioja y Castilla y León.
Grupo III: Navarra, Aragón y Cataluña.
Grupo IV: Comunidad Valenciana, Murcia y Baleares.
Grupo V: Madrid, Castilla-La Manch, y Canarias.
Grupo VI: Andalucía, Extremadura, Ceuta y Melilla.
Serie 2:
Esta propuesta de modificación supondría un aumento de equipos en Segunda B y Tercera división. En la actualidad, en ambas categoría militan 440 clubes (80+360), pero si se aprueba la reforma el número pasaría a ser de 560 entre la dos divisiones (20 en la serie 1 de Segunda B; 60 en al serie 2 de Segunda B, 120 en la serie 1 de Tercera divsión y 360 en la serie 2 de Tercera).
A través de un comunicado, ProLiga, asociación que aglutina a más de 350 clubes de Segunda B y Tercera división, no ha querido precipitarse a la hora de valorar esta propuesta y ha pedido tiempo para estudiarla con detenimiento. «Más allá de lo presentado en el congreso, que afecta directamente a muchos de nuestros clubes asociados, queremos poner en conocimiento de todos que nuestra asociación analizará todo lo allí acontecido como siempre desde una perspectiva de defensa de los intereses de nuestros clubes y de las categorías semiprofesionales, tal y como hemos venido desarrollando desde nuestra fundación», ha asegurado esta asociación a través de un comunicado.
Redacción
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