El nuevo, ilusionante y ambicioso proyecto deportivo del Ibiza para la 2019-2020 ha arrancado esta mañana con el primer entrenamiento de la pretemporada en Can Misses, donde ha imperado el buen rollo entre los jugadores. Pablo Alfaro y su equipo de trabajo se han puesto manos a la obra para poner a punto la maquinaria celeste en un stage de verano que se presume intenso y que se desarrollará en la isla y en tierras valencianas.

El preparador unionista ha asegurado en su primera rueda de prensa del curso que el plantel está “contento y con ilusión”, siendo uno de los objetivos marcados “dar continuidad” a la idea futbolística que se inició la campaña pasada, así como “aprender” de los errores cometidos “para mejorar”. Además, el maño dejó claro que la carga extra de presión que tuvo el plantel la temporada anterior no la van a “asumir desde el principio”.

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