El profesor de Economía de la Universitat de les Illes Balears (UIB) Amedeo Spadaro, a su vez, presidente de uno de los equipos de fútbol base más representativos de Mallorca, el CD Sant Francesc, calcula que el coste económico que han de soportar los clubs del balompié aficionado a causa de la alarma sanitaria del coronavirus asciende a cerca de 1,4 millones de euros. En el conjunto de España, la estimación del profesor Spadaro alcanza los 53 millones.

En este sentido, el prestigioso docente universario defiende que la alternativa más plausible ante la actual coyuntura es la de decretar, por parte de la Federación Española de Fútbol, la finalización anticipada e inmediata de la temporada futbolística con la finalidad de iniciar la tarea de «buscar soluciones para amortiguar el impacto de esta crisis».

SIN INGRESOS, Y CON LA OBLIGACIÓN DE PAGAR SALARIOS Y MANTENIMIENTO

Tras examinar en profundidad la situación, Spadaro ha incidido en que los clubs deberán afrontar unas complicadas expectativas, marcadas por la ausencia absoluta de ingresos en cuanto a cuotas de abonados y venta de entradas para la asistencia a los partidos, y la obligación de asumir el pago de los sueldos del personal unidos a los costes salariales respectivos y los gastos derivados del mantenimiento de las instalaciones.

Paralelamente, como indica Spadaro, «no hay previsto ningún tipo de ‘paracaídas’ económico, ya que ni el Gobierno ni la Federación han realizado la más mínima mención a los perjudicios que el coronavirus causa al futbol aficionado».

UN ‘ROTO’ DE 2.500 EUROS AL MES

Según los datos oficiales del Consejo Superior de Deportes (CSD), en España hay inscritos, aproximadamente, unos 21.200 clubs federados, con un promedio de unas cincuenta licencias. A partir de este dato, el profesor Spadaro ha calculado que cada uno de los clubs deberán hacerse cargo de un coste aproximado de 2.500 euros mensuales. Si se aplica este baremo a las contabilidades de las diversas entidades deportivas en el ámbito del balompié de base, el volumen de pérdidas en el conjunto del fútbol español asciende a 53 millones de euros, y a 1.373.097,29 euros en el caso de Baleares.

Muy por encima de las islas, al concentrar un mayor número de clubs y de licencias federativas, se hallan Cataluña (8,5 millones), Andalucía (7,8), Madrid (5,9) y Comunitat Valenciana (5,1). Los territorios en los que Spadaro ha previsto menos pérdidas son Navarra y La Rioja, con 825.000 y 387.000 euros, respectivamente, al margen de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

SPADARO: «LA ÚNICA ALTERNATIVA ES QUE LA FEDERACIÓN DECRETE LA SUSPENSIÓN DEFINITIVA»

Ante estas cifras, el profesor de Economía de la UIB sostiene que la suspensión inmediata de las competiciones de fútbol aficionado «permitiría a los clubs reducir los costes de forma casi definitiva» y, al mismo tiempo, según señala, no solo este ámbito sino el mundo del balompié en su conjunto, «podrían acogerse al cierre por situación de emergencia y, eventualmente, solicitar ayudas y compensaciones por parte de las autoridades públicas».

Ahora mismo, esta posibilidad no es factible ya que, como asegura Spadaro, la actividad de los clubs «está suspendida provisionalmente, y no definitivamente por parte del órgano competente», que es la Federación Española de Fútbol.