Ni los más optimistas podían imaginarse en octubre de 2018 que apenas un año y medio después el Cardassar, que está a cuatro años de su centenario (2024), volvería a tocar la gloria volviendo a la Tercera División balear. Y es que el club de Sant Llorenç lo perdió casi todo en la trágica torrentada que arrasó esta comarca. Sin embargo, ahora vuelve a sonreír.

La fuerza y confianza de la nueva directiva comandada por Jaume Soler ha sido uno de los causantes de este éxito. Sin embargo, el buen hacer y el enorme trabajo del entrenador Miquel Àngel Tomás y de su cuerpo técnico ha propiciado este ansiado ascenso, que ha llegado después de que la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB) decidiera que finalizaban las competiciones oficiales y que subían los primeros clasificados en el momento en el que fueron suspendidas a mediados del mes de marzo, debido al Covid-19.

«La lástima es no haber certificado el campeonato en el campo y ante la afición», señala satisfecho Tomás, que añade: «Todos juntos hemos conseguido el ascenso un año antes de lo previsto y un campeonato que hacía más de 60 años que no se conseguía. La lástima, repito, han sido las circustancias».

Este técnico es ambicioso y ya piensa en la próxima campaña. «La temporada que viene seguiremos en el club con intención de asentarnos en esta categoría, sabiendo que será muy exigente. Todas las partes tenemos claro que se debe dar continuidad al bloque actual siguiendo la línea de temporadas anteriores y fichando lo justo y necesario. Tenemos todos en mente no solo intentar hacer una buena temporada, sino también el hito de poder jugar la Copa del Rey por primera vez», explica a este diario.

El preparador, que estuvo en La Salle juvenil varias campañas, reconoce que «todo ello ha llegado ante un panorama social muy incierto». El equipo de Sant Llorenç acabó la Liga con 14 puntos de diferencia sobre su más inmediato perseguidor, el Campos. «El Cardassar es un club que se caracteriza por tener una directiva amplia que conjuga muy bien experiencia y juventud (Jaume S., Biel S., Guiem, Pep F., Saletas, Mestre), todos sus integrantes tienen un rol muy definido y que lo desempeñan con rigor y seriedad, y que se marcaron el objetivo de en tres temporadas subir el equipo a Tercera División. Lo han logrado antes», desvela.

Tomás elogia a su plantilla. «Estaba formada en gran parte por la que quedó tercera en Primera Regional y consiguió el ascenso. Solo hubo seis incorporaciones y apostó claramente con mantener el bloque y la esencia de la temporada anterior. Es una plantilla con trece jugadores del pueblo. Todos bajo las mismas características: seriedad, compromiso, cohesión pasión y mentalidad ganadora. 23 jugadores que se han entregado cada fin de semana», destaca.

Diario de Mallorca