Alineaciones:
La presión alta de los baleares, y un fallo entre Sergio Ruiz y Mfulu, fue castigado con el gol visitante, anotado por Castel, que definió con el exterior del pie derecho a pase de Nono. Es el tercer tanto consecutivo del ariete celeste.
Hasta el descanso defendió su tesoro este sorprendente Ibiza, ante un equipo canario que acaparó el balón, pero que no encontró los caminos para desajustar la aplicada zaga visitante.
Un zurdazo del lateral Sergi Cardona que se estrelló en el exterior del palo, un balón que se le escapó de las manos a Germán y una falta que lanzó Jonathan Viera y rechazó en Fran Grima, en la barrera, fueron las ocasiones locales más claras.
El equipo amarillo salió desconcertado tras el descanso y el Ibiza, solidario en defensa y vertical en ataque, perdonó el segundo gol tras una pérdida de Jesé, tirado a la banda izquierda, con robo de Nono, conducción de Appin y remate alto de Bogusz ante el meta.
Los necesarios cambios en ambos equipos le dieron una vuelta de tuerca al partido, y de forma paradójica, el joven Moleiro, sustituto de Viera, empató a poco de entrar, cruzando por bajo un pase atrás de Pejiño desde la banda izquierda; el balón, tras dar en el poste, se coló en la portería.
Las Palmas se desató con el tanto, y la inercia le hizo vivir sus mejores momentos, por lo que al Ibiza le tocó sufrir durante algunos minutos. Así, Germán evitó el segundo gol local con una buena parada a disparo de Pejiño.
El equipo de Carcedo sobrevivió al tsunami, defendiendo más en campo rival, e incluso se proyectó con cierto peligro en los minutos finales, que ya no modificaron el reparto de puntos entre un teórico aspirante al ascenso y un recién ascendido que continúa dejando una gran impresión.
Redacción
eldiario
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