El Mallorca logra su primer triunfo en Son Moix y el segundo en lo que llevamos de competición, no sumaba de tres desde septiembre. Rajko hace trizas las estadísticas en un partido para enmarcar.

Cierto estadista dijo que se puede demostrar estadísticamente que la estadística puede no servir para nada, Rajkovic y un Sevilla metido en una dinámica en la que cuando todo lo que pueda salir mal, saldrá mal, lo demostraron en este partido.

El Sevilla llevó el peso del partido con un 67% de posesión y el Mallorca se limitó a defender el gol conseguido a los 11 minutos de partido, luchando atrás con bravura haciendo inútiles los 570 pases sevillistas (con un 86% de precisión), que realizaron para llegar a la portería rival, y cuando llegaron ahí estaba Rajko. Lanzaron 19 tiros, 5 de ellos entre palos con merecimientos de gol, por 3 del Mallorca. ¨El guanyar fa riure¨ decimos por aquí, pero no nos engañemos, la estadística también reza que de 10 partidos como este perderás 9.

El encuentro dio comienzo con dominio visitante, y a los 4 minutos Ocampos ya tuvo la primera con un tiro raso y cruzado, que Rajko desvió con el pie evitando el primero. Acto seguido Dani centra a Samu que no consigue controlar y el balón le cae a Cyle Larin y, casi sin moverse, lanza un zurdazo fuerte, duro, seco y sin opción para Dmitrovic por lo ajustado que iba a su palo izquierdo.

Llegó el paso atrás mallorquinista y comenzó el recital del serbio. Paradón de nuevo a Ocampos al neutralizarle un buen remate de cabeza, con gran estirada. El Sevilla quería llegar al descanso con el empate, pero era un querer y Rajkovic negar, a los 45 minutos calló un huyyy con otra gran intervención a disparo de Juanlu.

Empezó la segunda parte y los andaluces volvieron a la carga, En-Nesyri se va por velocidad e intenta burlar a Rajko, que vuelve a lucirse estirándose con fuerza y nitidez negándole cualquier posibilidad al delantero. La grada con la boca abierta ante el recital de su portero, agotando los elogios, empieza a corear su nombre y éste responde con otro paradón a remate de cabeza de Sergio Ramos.

La única manera que tuvo el Sevilla de sorprender al portero de Son Moix fue con disparo a dos bandas, disparo de Pedrosa a la espalda de su compañero En-Nesyri desviando la trayectoria natural del balón, pero el VAR consideró que el desvío fue con el codo y, por consiguiente manos y gol anulado.

El Sevilla se iba desquiciando poco a poco y dejaba espacios atrás, en uno de ellos los recién entrados Abdón Prats y Antonio Sánchez pudieron cerrar el partido en una buena contra. Abdón se lanza contra el único central que había quedado atrás, conduce con mucho criterio hacia él esperando su movimiento y elegir la mejor opción, que no fue otra que ceder a Antonio Sánchez que llegaba solo, éste recibe y se planta ante Dmitrovic que quiso emular a su colega Rajko y evitó el 2-0 con gran intervención.

Gran resultado en un partido donde lo único que valía era ganar o ganar, con este primer gran paso obtenido sobre una buena defensa y un inexpugnable Rajkovic, esperamos llegue la tranquilidad necesaria para dar el paso al frente que merece la afición mallorquinista y el esfuerzo realizado por la propiedad y ver algo más que una gran defensa.