Goleada del Athletic en San Mamés ante un Mallorca que nunca hincó la rodilla, pero tampoco creó dudas que el resultado final no dependiera, únicamente, de lo que apretara el equipo local tras el 2-0 en los primeros 15 minutos. Javier Aguirre cambió el 5-3-2 de los últimos encuentros con la vuelta al 5-4-1, decisión que parecía muy acertada ante el rival y escenario que le esperaba, criticarlo ahora tras el descalabro resulta muy fácil. Estaba claro que Aguirre pretendí con ello, amarrar bien el primer cuarto de hora sin sobresaltos e intentar ganar en confianza con todo bien atado atrás, en espera que se creara alguna vía de salida ante el inicial dominio sin fruto de los locales.

Cualquier parecido de la realidad con lo esperado sería pura imaginación. A los tres minutos de juego ya había subido el 1-0 al marcador, un bello gol de Yuri de espaldas a la portería de Rajkovic, que en ningún instante pudo ver desde donde le llegó el balón, Larin protestó posible falta por juego peligroso en la acción de Yuri, el árbitro señaló gol y juego maravilloso con acertado criterio. Este gol hizo saltar chispas en todos los cables del entramado preparado por los bermellones, y pocos instantes después (min.16) llegaba el segundo de Yuri que los desconectaba de forma definitiva. Nico sacó un córner, Gorka Guruzeta recibe y se adorna prolongando de espuela y Yuri recibe a media altura, un balón típico para poder romper de volea, lejos de ello Yuri la coloca con sutileza justo en la escuadra de la portería mallorquinista.

Partido resuelto en 15 minutos, los jugadores bermellones se miraban sin saber que hacer desconcertados, el Athletic les había hecho añicos el guion con el que llegaban y el trabajo de toda la semana, miraban al banquillo y no llegaban instrucciones de un posible plan B. Aguirre parece estar más pendiente de hablar y presionar a cuarto árbitro, jueces de línea etc, en vez de buscar soluciones para su equipo, aunque siempre acabe diciendo que no ha dicho nada y que la labor de los árbitros es muy respetable y difícil, podríamos añadir que a pesar de su incordio constante. El Athletic pareció relajarse un poco ante el gran compromiso que le espera en pocas horas, pero el Mallorca no lo aprovechó más que para lavar algo su imagen sobre el césped. Lo que estuvo a punto de llegar fue el 3-0 tras un impresionante cabezazo de Guruzeta, con potencia y colocación, pero Rajko respondió con un paradón espectacular que aplaudió San Mamés y muchos aficionaos se llevaban las manos a la cabeza.

En la segunda parte, el Mallorca pasó a defensa de cuatro al entrar Muriqui por Copete, pero nada cambió este Athletic es mucho Athletic. También entraron Sergi Darder y Nacho Vidal, que en su debut como mallorquinista estuvo a punto de marcar en un cabezazo no menos potente que el de Gorka pero más centrado ante un atento Unai Simón. El Mallorca lo intentaba pero sólo jugaba y llegaba hasta donde querían los de Bilbao que marcaban el tiempo del partido, apretaban y/o bajaban el nivel de esfuerzo físico en función de las exigencias, pensando en lo que le viene y tiene depositadas grandes esperanzas.

A los 61 minutos llegó el tercero, marcado por Gorka Guruzeta tras revisión del VAR. Muniain cerró el marcador con el cuarto gol, cuando los dos equipos ya habrían firmado el final ante una situación que llevaba muchos minutos irreversible para unos y suficiente para otros.

El partido parecía de guante blanco, incluso entre jugadores y árbitro que tampoco tuvo su día, dando sentido a la utilización del VAR. Anuló el tercero de los locales y el VAR le tuvo que corregir lanzando las líneas dando validez al gol. Señaló un penalti contra el Mallorca por un resbalón de Nico que el VAR rectificó y no se lanzó. Un VAR que entró para corregir lo señalado por Figueroa Vázquez, pero no quiso ver un claro penalti de Yuri sobre Raillo con el 1-0 en el marcador, penalti que de haber sido señalado y convertido, hubiera devuelto el papel del guion trabajado a los jugadores barralets.

En cualquier caso tampoco hay que rasgarse las vestiduras, perder ante este Athletic entra en la posibilidad de todos y cada uno de los equipos de este campeonato. Un Athletic que lleva 8 jornadas sin ceder un punto en San Mamés, que se encuentra a 2 puntos de posición Champions, a la espera de la visita del Atlético de Madrid al Bernabeu y la del Barcelona a Vitoria ante el equipo de Luis García que está cumpliendo una buena temporada, lejos de las posiciones de descenso y con buen fútbol. Satisfacción personal resultó ver como el gran juego Iñaki y Nico por las bandas, las llegadas con peligro de Gorka Guruzeta, el movimiento del centro del campo y las incorporaciones de los carrileros, Yuri incluido, todo pasa bajo la batuta del comandante Ruiz de Galarreta.

Ahora toca aparcar la Liga y centrarse en el Mallorca copero, sí el que eliminó al líder Girona.