Crónica 1ª División: RCD Mallorca 0-1 C. Atlético de Madrid

Oblak marcó la diferencia

Alineaciones:

RCD Mallorca: Greif; Maffeo(A. Sánchez, 75′), Valjent, Raíllo, Mojica, Navarro(Dani Rodríguez, 75′), Samú, Morlanes(Luna, 83′), Darder (Chiquinho, 69′), Larin(Abdón, 69′), Muriqi.

C. Atlético de Madrid: Oblak; Molina, Giménez, Lenglet(Witsel, 62′), Reinildo, Giuliano(Correa, 62′), Koke, Barrios, Riquelme(Gallagher, 86′), Julián(Sorloth, 62′), Griezmann (De Paul, 62′).

Gol: 0-1 Julián Álvarez(61′).

Árbitro: José María Sánchez Martínez asistido en bandas Raúl Cabañero Martínez y José López Mir. 4º árbitro Alejandro Ojaos Valera. VAR Daniel Jesús Trujillo Suárez. AVAR Víctor García Verdura.

Tarjetas: amarilla a los locales Samú Costa(57′) y Jagoba Arrasate(63′)(E) y a los visitantes Clement Lenglet(10′), Reinildo(83′) y Correa(90′).

Incidencias: Encuentro correspondiente a la jornada 13 de LaLiga EA Sports en el Estadio Mallorca Son Moix ante 19.500 espectadores. Antes del saque inicial se guardó un minuto de silencio como homenaje a las víctimas y damnificados por la DANA.

Comentario:

Evitando la inauguración del marcador por parte mallorquinista con gran intervención a cabezazo de Larin, dando asistencia de gol aprovechando la desguarnecida defensa local en su intento de acoso sobre el área madrileña y minimizando el único fallo defensivo de su equipo, parando el empate que llegaba de las botas de Abdón Prats, fue el gran protagonista del triunfo colchonero esta tarde en Son Moix.

El partido empezó muy igualado, con dos equipos con el mismo dibujo (4-4-2) y mostrándose mucho respeto. Dos defensas muy sólidas dejando, ambas, poco espacio con su línea de centro del campo e intentar avanzar en búsqueda de sus puntas. Conforme transcurrían los minutos el Mallorca inclinaba ligeramente el campo, mientras hacía retroceder las líneas de cuatro de Simeone más cerca de su área, pero los bermellones no encontraban hueco por donde hacer daño. La única ocasión de gol, en toda la primera parte, llegó a los 40 minutos y fue bermellona, Sergi Darder mandó un buen centro para el remate de Larin o Muriqi que entraban como obuses, fue Larin quien remató de cabeza y Oblak se lució con gran estirada enviando el balón a córner.

La segunda parte comenzó con intenciones similares por ambas partes, pero la rigidez en el dibujo no era tan evidente, el corazón y ganas de llegar arriba creaba momentos de ligeros desajustes, que hacía más vistoso el partido. En una de estas, Larin intentó zafarse de Lenglet que le agarró por la cintura con las dos manos, Larin intentó seguir por fuerza, pero se llevó puesto a Lenglet que continuó agarrándole durante un «recorrido» de unos 6 metros hasta que le derribó, incomprensiblemente el colegiado señaló la falta seis metros más atrás, justo donde comenzó todo, sin mostrarle la cartulina amarilla, debió acordarse que hubiera sido la segunda y dejaba a los atléticos con 10 jugadores.

El Mallorca iba rompiendo la igualdad y se imponía a su rival en dominio y llegadas al área rival, aunque fuera sin peligro. La acumulación de hombres en busca del intento de remates a centros desde las bandas acabó siendo excesiva y, en una de estas ocasiones con todo el equipo en área rival, Oblak blocó un balón y lanzó un gran pase a Giuliano que se aprovechó de la falta de comunicación entre Mojica y Pablo Maffeo y se plantó solo ante Dominik Greif y, en un acto de gran generosidad cedió a Julián Álvarez que marco sin oposición a puerta vacía. Transcurridos unos minutos pudo llegar el 0-2, pero toda la generosidad que había lucido Giuliano en el gol, le faltó a Riquelme que, teniendo a Correa totalmente solo para poder repetir un gol sin oposición, prefirió intentar batir a Greif que paró con gran intervención.

El resto de partido fue mallorquinista en busca del empate, ante un Atlético de Madrid encerrado, defendiendo el gol de ventaja con solvencia. El dominio bermellón forzó el único fallo en la defensa colchonera, a cinco minutos del final, pero volvió a aparecer Oblak y evitó el empate de las botas de Abdon Prats que había sustituido a Larin.

Los tres puntos se fueron a Madrid y el Mallorca se quedó sin sumar, entre aplausos de la afición premiando el esfuerzo realizado. Ahora toca descanso ante el parón de selecciones, parón al que se llega con 18 puntos, octavos en la tabla sin saldo negativo entre goles a favor y goles en contra y siendo, junto al Atlético de Madrid el equipo menos goleado de la categoría.

Toni Ferrer para Fútbol Balear.

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