«No me gustaría pensar que hay facturas pendientes conmigo y que las pague el club», dice el propietario sobre Villar.

J. BAUZÀ. PALMA. La mejor defensa es un buen ataque. Mateu Alemany ha pasado a la ofensiva para prevenir contra las dos supuestas amenazas que pondrían en peligro la presencia del Mallorca en Europa la próxima temporada: la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y el Athletic de Bilbao. «He advertido a la Federación y a la Liga que si a nosotros, por ser un equipo pequeñito que molesta a equipos importantes habituados a ir a Europa, por no estar en el glamuroso ambiente federativo, se nos quita de enmedio aplicando rigurosamente la licencia UEFA, vamos a pedir que se aplique a todo el mundo con el mismo rigor», amenazó el propietario bermellón la noche del lunes en declaraciones a la Cadena Ser.

Alemany reiteró su convencimiento de que la crítica situación económica del club, a las puertas de un concurso de acreedores, no es motivo para vetar su presencia en la competición europea. Pero no ocultó su preocupación por el hecho de que la última palabra la tenga el presidente de la RFEF, Ángel Maria Villar, al que quiso descabalgar del sillón presidencial presentando una canditatura alternativa. «El Mallorca ha sido un club que no ha estado en el ambiente federativo en muchos años y somos los únicos en España que no hemos estado ahí. Y no hemos estado porque mantenemos tesis diferentes y no nos callamos. No me gustaría pensar que se pasan facturas pendientes conmigo y que ello lo pague el Mallorca», subrayó el mallorquín arrojando una sombra de duda.

«Ese mensaje de que el club no podrá jugar en Europa se ha enviado interesadamente y no tiene ningún fundamento. El reglamento de la licencia UEFA en ningún caso especifica la prohibición de acudir a un club en situación preconcursal. La situación del Mallorca es mala, pero no peor que la de casi todos. Y especialmente que la de muchos que van a Europa cada año sin problemas. Los reglamentos federativos son tremendamente elásticos en su confección y ejecución. Y no voy a permitir que a nosotros se nos aplique una vara de medir que no se aplique a los demás», abundó el andritxol. «El principio básico de ese reglamento es el de ´empresa en funcionamiento´ y se refiere a la viabilidad económica del club. Y eso tiene que ver con la deuda. Comparar la deuda del Mallorca con la de muchos clubes importantes de este país es ridículo», añadió el propietario, al tiempo que reconoció una deuda neta de «40 o 45 millones de euros».

Al margen de las cuentas pendientes que pueda haber con Villar, la denuncia del Athletic de Bilbao por el impago de parte del traspaso de Aduriz también amenaza con cerrar el paso del equipo a Europa. «El Athletic compite con nosotros por una plaza en Europa y hay un interés obvio de ese club de excluirnos porque hay mucho en juego. Pero quiero recordar que el reglamento UEFA habla de deudas entre clubes a 31 de diciembre y la de Aduriz es posterior», dijo Alemany.

Finalmente, el propietario del club volvió a criticar la falta de apoyo económico que recibe de las instituciones. «Los políticos viven al margen, independientemente de que a veces acudan al palco porque tiene su glamour. Pero tenemos asumido que no podemos esperar nada de ellos. No voy a perder más tiempo en eso», lamentó Alemany.

DIARIO DE MALLORCA