El Club de Inca ha iniciado esta semana la renovación del terreno de juego, en concreto una “siembra de transición”. El proceso de esta labor va a tener una duración aproximada de 3-4 semanas, lo que supone que el primer equipo no va a jugar sus partidos de casa en el Nou Camp. En primera instancia sólo afectará a un partido, el que juegan CE Constància contra Platges de Calvià el miércoles 1 de noviembre, el resto de partidos se juegan a domicilio. El Nou Camp reabrirá sus puertas el próximo 18 de noviembre contra el Esporles, si no hay ningún contratiempo en la resiembra.
Esta tarea se lleva a cabo para afrontar las adversidades que provoca el invierno al terreno de juego. Para la ocasión se va a plantar “Ray grass”, una variedad de césped para optimizar su crecimiento, rendimiento y durabilidad. Además, se van a realizar distintos trabajos de mantenimiento y pintura con el propósito de adecuar al máximo el estadio.
La directiva agradece la comprensión y paciencia del primer equipo y la afición para dicha reforma, el esfuerzo va a servir para tener un terreno de juego más competitivo y profesional. La ilusión del Club es seguir sumando victorias en el Nou Camp y ofrecer grandes tardes de futbol a sus aficionados para continuar con esta dinámica de buen juego y gran afluencia de público alcanzada hasta ahora.
Constancia
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