Alineaciones:

Lleida Esportiu: Víctor Vidal, Pau Sánchez, Joel Porte, Ramón Verdes(Toni Viente min.85), Albert Vila, Sergi Quintilla, Juana Carlos Solana(Andreu Torres min.57), Joan López, Óscar Dueso, Iker Cortes(Neider Valencia min.74), Adrià Gené(Cèsar Minuesa min.89).

San Francisco: Marc Rey, Tomas Sánchez, Marc Matas, Pablo Ramon, David García, Xavier Sintes(Alex Ebulabate min.83), David Valverde(Adrián Llaurado min.63), Jaimer Manresa, Pere Pons(Pedro Rodríguez min.74), Miquel Llabrés(Sergio Molina min.84), Marcos Martínez.

Goles: 1-0 Joan López min.4, 1-1 David García min.89.

Árbitro: Albert Avalos asistido en bandas por Guillem Mensa Moncunill y Daniel Degracia Arnau.

Tarjetas: amarillas para Joan López min.43 y Andreu Torres min.83 por el Lleida y para Miguel Magaña min.52 por el San Francisco.

Comentario:

El SanFran nunca se rinde. Quizás por eso lleva 15 temporadas consecutivas en la élite Juvenil en España y se ha asegurado, a 5 jornadas del final del campeonato de liga, otra participación más en la próxima.

Con el objetivo de la salvación conseguido entre semana, ya que se adelantó el UE Sant Andreu 0-3 FC Barcelona, los nuestros saltaban al campo del municipal de Gardeny con la firme convicción de disfrutar del partido y de hacerse amos y señores del balón.

Y así fue de principio a fin. El guión solo se rompió tras un centro de banda izquierda que, tras un mal despeje de la zaga visitante, era rematado en semifallo por Joanet y en el minuto 4, ponía por delante a los locales.

Los locales salieron muy intensos pero fueron borrados del campo por los visitantes bien pronto, aunque el dominio de los rojos no se tradujera en ocasiones en esos primeros compases.

En cuanto empezaron a entrar más en juego Sintes y Manresa y la línea defensiva circuló más rápido en busca de Marcos y Valverde, las ocasiones se sucedieron.

Lo lógico habría sido resolver el partido antes del descanso con dos remates de Pere y dos más de Valverde desde dentro del área pequeña que fueron incapaces de encontrar portería. Quien si lo hizo al filo del descanso fue Marcos en una gran combinación con Matas, de lo mejorcito del partido, pero Victor respondió muy seguro y desbarató la opción para empatar de los visitantes.

Los locales, con un planteamiento rácano tras el gol, se limitaron a intentar controlar el partido con pérdidas de tiempo cada vez que se paraba el juego y contaron con un aislado remate fuera de Juanca tras otro centro lateral.

Incomprensiblemente, y esta es la grandeza de este deporte, los mallorquines se iban al descanso por detrás en el marcador.

Parecía que no íbamos a tener agua… y al final cayó un importante chaparrón al inicio del segundo tiempo. Parece que el contacto con el agua produjo en los nuestros el mismo efecto que tiene sobre los Gremlins y los espoleó en ataque.

Pere volvió a tener una ocasión muy clara tras un centro desde banda izquierda, una banda izquierda por la que Marcos y Matas llevaban por el camino de la amargura a todos los rivales que conseguían acumular.

La entrada de Pedro y Adri nos aseguraron tener más balón en campo rival y mejoramos en la transición con la entrada de Alex en la medular. Eran minutos en los que en cada córner y falta lateral conseguíamos rematar; García y Tomás algo forzados no encontraban portería y no acabábamos de cazar ningún balón prolongado cuando parecía que Marcos o Pedro iban a quedarse mano a mano con el portero local.

El fútbol fue un poco justo con los nuestros en la última acción del partido en la que, en una falta en la frontal, Manresa reventó con el alma el balón y en su trayectoria hacia la red fue desviado por una nube de jugadores. Y decimos un poco porque, en condiciones normales, éramos merecedores de la victoria. Eso sí, en nuestro ataque a tumba abierta, el Lleida dispuso de dos opciones de cerrar definitivamente el choque con un disparo lejano que desvió Marc a córner y con un mano a mano de Oscar que también resolvió magistralmente nuestro meta.

No hubo tiempo para más, solo para celebrar el gol en el córner, fundidos en un abrazo, con la sensación del que cumple con su trabajo insistiendo, persistiendo y nunca desistiendo.

Tras este empate in extremis y tras conseguir el objetivo de la permanencia, los nuestros vuelven a jugar como locales después de un mes recibiendo al Real Zaragoza el próximo domingo a las 11:15h en Son Bibiloni. Partido marcado en rojo en el calendario por los locales después del severo correctivo que recibieron en la primera vuelta en tierras mañas y que seguro que aprovecharán para celebrar con su afición el éxito de esta temporada.

 

Redacción