El equipo rojiblanco hilvana cuatro partidos invicto, su mejor racha del curso, y escapa de la última posición de la clasificación que ha ocupado doce jornadas consecutivas.

La reacción del Mercadal es real. El equipo rojiblanco, tras delinear un funesto primer trecho del mes enero (tres derrotas consecutivas, ante Formentera, Felanitx y Platges de Calvià, para empezar el nuevo año), que significó abundar en una situación de depresión que parecía no advertir fin, ha invertido esa tendencia a la baja para precisamente convertir el duro tropiezo sufrido a manos del Platges en el punto de inflexión a partir del que iniciar una remontada que, casi cuatro semanas después, ha tomado forma, como ejemplifican dos aspectos capitales.

Uno, el cuadro rojiblanco recorre actualmente su mejor racha en la presente campaña, al hilvanar un lapso de cuatro partidos consecutivos sin perder –un triunfo y tres empates–, que incluye la primera victoria de la temporada, conseguida sobre el Santanyí (1-0), el duelo correspondiente a la última jornada de la primera vuelta, aplazado en su día, que se empató en feudo del Murense (1-1), y otro par de igualadas –Constància (1-1), que inauguró este ciclo; y Alcúdia, el pasado fin de semana en Mallorca (0-0). En esa secuencia de invulnerabilidad, que se prolonga casi un mes, el Mercadal se ha embolsado seis puntos de doce posibles, un ritmo de puntuación que supera el trío de empates seguidos con que liquidó 2018 –que había sido hasta ahora, su secuencia más solvente.

Diario de Menorca