El Español se proclama campeón de la Copa SM la Reina: RCD Espanyol 3-1 Rayo Vallecano

El Espanyol campeón por segunda vez consecutiva de la Copa SM la Reina
El Espanyol campeón por segunda vez consecutiva de la Copa SM la Reina

Alineaciones.

RCD Espanyol: Mariajo (Marina m.93), Ane, Torrejón, Lara, Meseguer, Kenti, Conti (Corredera, min.90), Mery, Monforte, Vero, Miriam Diéguez.

Rayo Vallecano: Alicia, Chabe (Jade, min.66), Natalia, Adriana, Burgos, Alexandra, Willy (Estefi, min.84), Vanesa, Keka (Sonia, min.32), Sandra, Mely.

Árbitro: Isturiz Latorre. Sacó amarilla a Conti (min.42) y a Vero (min.73). Por el Rayo sacó amarilla a Vane (min.74) y roja directa a Alicia (min.83)

Goles: 1-0 Ane (min.7), 2-0 Mery (min.31), 2-1 Natalia (min.49), 3-1 Torrejón (min.64).

Comentario:

El Espanyol gana la Copa de la Reina en memoria de Jarque

Las pericas conquistan su quinto título en un duelo espectacular ante el Rayo Vallecano, campeón de la Superliga

El Espanyol revalidó su título de campeón de la Copa de S.M. la Reina al derrotar al Rayo Vallecano en un partido eléctrico y muy disputado. El cuadro periquito se tomó así la revancha de su derrota frente a las franjirrojas en la final de la Superliga y conquista su quinta Copa, a un solo trofeo del Levante.

La final, disputada en el Polideportivo Artunduaga de Basauri, respondió a las expectativas creadas por los dos mejores equipos del panorama del fútbol femenino nacional. El gol de Ane apenas comenzado el partido, adelantándose a la defensa rayista para cabecear a la red un lanzamiento de falta, rompió de un plumazo todos los corsés tácticos que se suponían en dos equipos que se conocen tan bien. A partir de ese momento el Rayo se lanzó sin reservas al ataque y pletórico de fuerza empujó a su rival hacia el área. Sin embargo, pese a disponer de ocasiones claras en las botas de Natalia, por tres veces, y Adriana, falló en la suerte de gol, algo raro tratándose de dos jugadoras que han marcado esta temporada nada menos que 40 y 37 goles, respectivamente.

La ofensiva vallecana ofreció al Espanyol espacios para explotar su contragolpe. Vero se convirtió en un estilete en este sentido. Se colocó de teórica delantero centro y desde allí rompió una y otra vez por velocidad al dúo formado por Vane y Chabe. Un disparo que se le fue alto y otro que mandó al poste fueron el preludio del segundo tanto, en el que la jugadora gallega envió un preciso pase en profundidad a la carrera de Mery para que ésta levantase el balón por encima de Alicia en su salida.

A la vuelta del descanso el Rayo se jugó el todo por el todo. Y vio cómo otra contra veloz de Vero acababa con un nuevo remate al poste de la meta de Alicia. Pero con Vane ya incorporada a la creación en el centro del campo, el Rayo acorraló aún más al conjunto perico y en una jugada embarullada tras el lanzamiento de un córner Natalia acortaba distancias con un derechazo inapelable desde el borde del área pequeña.

Durante unos minutos pareció que había final, que el Rayo podía dar la vuelta al marcador. Pero fue un espejismo. A cada ataque rayista, movidas sus jugadoras más por el corazón que por la cabeza, respondía el Espanyol con certeras contras que ponían a Alicia en apuros. La guardameta desvió al larguero un zambombazo de Kenty desde fuera del área en el minuto 62 y apenas uno después, en otra jugada a balón parado, Torrejón se adelantaba a su marcador para cabecear un córner y colocar una distancia sideral en el partido, que aún pudo ampliar Lara si llega a alcanzar el balón cruzado al segundo palo que le sirvió Sara Mérida.

Aunque el Rayo siguió intentándolo hasta el final, el Espanyol cerró su defensa a cal y canto incorporando a Lara a la línea de centrales y ni Mariajo ni Marina, que sustituyó a la meta titular en los últimos compases, volvieron a pasar apuros. El Espanyol revalida así el título que conquistase en Zaragoza la pasada temporada y se reparte la hegemonía del fútbol femenino español junto a su rival de hoy.

Miriam, capitana del Espanyol, recibió la Copa de manos de la alcaldesa de Basauri, Loly de Juan, enfundada en una camiseta con el dorsal 21 y el nombre de Jarque, en recuerdo de su compañero de equipo tristemente fallecido y al que la plantilla del femenino dedicó el título en este torneo, cuya brillantez deportiva y organizativa han destacado tanto las autoridades de la ciudad, a la que ha dado brillo durante la celebración de su 500 aniversario, como los técnicos y las propias jugadoras.

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