R. CABOT. PALMA. La UEFA comunicó al Mallorca en la noche del pasado martes, vía telefónica, que la anulación de la visita que una delegación del organismo europeo debía realizar ayer al estadio de Son Moix se debe a que está estudiando la situación financiera de la entidad mallorquinista junto a la Federación Española. La denuncia que interpuso el Villarreal contra el Mallorca con el único objetivo de que no se le permita disputar la Liga Europa la próxima temporada por entrar en concurso de acreedores ha sido determinante para que la UEFA frene momentáneamente el permiso al club rojillo para disputar competiciones europeas.

Todo estaba preparado para que ayer, a las nueve de la mañana, una delegación de la UEFA visitara el estadio de Son Moix, después de hacerlo el lunes con el Alfonso Pérez Muñoz de Getafe y el martes con el Vicente Calderón. David Bano, Fernand Meese y Maite Albéniz eran los tres cargos del organismo europeo que debían visitar el recinto mallorquinista. Los anfitriones del Mallorca debían ser el gerente Juan Barrios; el director de Marketing Juanjo Amengual; el jefe de prensa Héctor Romero y el jefe de seguridad de la empresa Trablisa. Posteriormente estaba prevista una comida antes de que la delegación partiera a sus lugares de origen.

Pero todo se fue al traste con el correo electrónico enviado al Mallorca en el que se comunicaba la anulación de la visita, sin dar ningún motivo ni fijar una nueva fecha, lo que supone un motivo de preocupación más Matreu Alemany. Lo cierto es que desde ayer ya es oficial: la participación del Mallorca en la Liga Europa corre más peligro que nunca. Los números del club son mirados con lupa por la denuncia del Villarreal, que puede estar cerca de ver cumplido su objetivo.

Diario de Mallorca