El Real Mallorca adoptará una solución radical para desprenderse de técnicos y futbolistas con salarios elevados e indemnizaciones gravosas. La nueva propiedad capitaneada por Llorenç Serra Ferrer tiene previsto presentar esta semana ante la Conselleria de Trabajo la solicitud para aplicar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a jugadores, miembros del cuerpo técnico y empleados.

La nueva propiedad considera que el ERE es la única herramienta eficaz para deshacerse de Nando Pons, vinculado contractualmente al club hasta 2014. El director deportivo se irá con algunos de los colaboradores de su máxima confianza en el área deportiva, como Paco Navarrete y Marcos Martín de la Fuente.

El Mallorca también incluirá en el ERE a futbolistas que no entran en los planes de Laudrup y que por su escasa proyección deportiva tendrán una muy difícil salida en el mercado. Germán Lux, Enrique Corrales y Juanmi Callejón serán incluidos con toda seguridad en el Expediente de Regulación de Empleo. Tampoco se cuenta con Josemi y Webó, pero los responsables de la entidad consideran que estos dos jugadores pueden encontrar equipo, aunque sea concediéndoles la carta de libertad.

El expediente afectará además a varios empleados del Mallorca de todas las categorías profesionales. La conselleria de Trabajo debe autorizar el ERE, al que solo pueden acojerse empresas en quiebra, y que permite el despido con veinte días de indemnización por año trabajado.

El recurso a una medida tan drástica es de obligado cumplimiento para un club que Vicenç Grande gestionó con absoluta desmesura. Juanmi Callejón es un buen ejemplo. El ex propietario del club y Nando Pons ficharon al futbolista en el verano de 2008 por un millón de euros. Una cifra desorbitada para un jugador que ni siquiera fue titular la pasada temporada en el Albacete, donde fue cedido.

El Mallorca y Nando Pons iniciaron negociaciones para pactar una salida amistosa. Pero la demanda del director deportivo en funciones de tener inmunidad sobre el millón de euros que le regaló Grande por la venta de Dani Güiza hizo imposible el acuerdo.

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